Marcial Riverol

Palmeras. Salvajes todos

No se necesitan muchas palabras para calificar el acto vandálico perpetrado sobre la palmera de Masdache, pero se me ocurre que tal hecho merece algunos apuntes y, aunque estoy a la espera, no veo a nadie que realice ninguna reflexión sobre el asunto. Lo cierto es que no percibo muchas reflexiones sobre casi nada, como si todos estuviéramos idiotizados y se nos hubiera evaporado alguna facultad.

Ya he perdido la cuenta del número de ejemplares de palmera canaria que han sido talados tras una larga agonía sin recibir atención alguna. Y llevamos años así. Nadie ha hablado de ellos y, ni tan siquiera, a quien se les presume determinado grado de competencia se le ha visto intervenir durante largo tiempo.

Arrecife no se ha librado -y aún hoy se repite la misma dinámica- de que sigan muriendo ejemplares por el abandono, obsérvese, si no, las cunetas de la vía que conduce al muelle de Los Mármoles. Nadie ve, nadie mira, nadie observa, nadie denuncia, nadie interviene. A veces pienso que la civilización es un espejismo en esta isla, que parece moverse en una dimensión desconocida, aunque capaz de las mayores tropelías. Le va a la saga Tías, donde la muerte de ejemplares en zonas públicas es notoria, incluso en el mismo casco urbano sin que nadie parezca actuar. Realmente, toda la isla viene siendo un despropósito en su falta de atención a esta especie vegetal, pues las manifestaciones de que demandan tratamiento son perceptibles desde los primeros estadios de sus patologías. Y reversibles. Incluso desde las administraciones con competencia se ha venido informando favorablemente la autorización de talas de ejemplares por encontrarse enfermos. Como si las enfermedades que padecen de forma masiva nuestras palmeras carecieran de tratamiento. La palmera de Masdache, su tala, viene a escenificar la actitud de todos nosotros frente a nuestras palmeras, pues, hasta el último ciudadano, absolutamente todos hemos tenido en nuestras manos una figurada motosierra con la que nos hemos ido cargando una a una los cientos de palmeras que hemos estado matando -y seguimos en ello- durante un montón de años. Si ha leído hasta aquí, por favor, véase con una motosierra en la mano, así sea usted funcionario/a, representante público, político en la oposición, periodista, empresario turístico, alcaldesa, alcalde...

La de Masdache representaba, la batalla de la naturaleza por la supervivencia. Un golpe de viento debió tumbarla hace décadas, pero encontró apoyo en un talud existente que permitió mantener parte de su sistema radicular bajo tierra. No sólo sobrevivió, sino que continuó creciendo hasta adoptar esa forma tan singular. La de Masdache no hace más que representar la muerte de todas las palmeras de la isla en manos de esos salvajes que somos todos. Y que dejen de mirar como culpable a algún visitante desaprensivo.

Se les debería caer la cara de vergüenza a quienes antes se hicieron silencio y hoy claman en los medios, y se lamentan y ponen la maquinaria a funcionar. Y no les pregunto dónde estaban los organismos que deben velar por la naturaleza, lleven o no uniforme. Como si el a abandono de todas las demás palmeras no viniera siendo un delito perpetrado por todos los ayuntamientos durante años. Y por el Cabildo.

No voy a terminar diciendo que es esta una isla de m…, pero me quedo sin palabras para calificar a su gente y a sus dirigentes. Es que es de traca.

Comentarios

Pues mire usted, puede hacer autocrítica también y hacer una reflexión más amplia: está usted poniendo el grito en el cielo por unas plantas ornamentales, cuya plantación fue desafortunada en esta isla y cuyo mantenimiento a día de hoy es inviable y sin embargo obvia que en estas misma isla existen varias especies de plantas endémicas y en peligro de extinción para las que no se destina ni un solo euro! Parece que la palmera no le deja ver el bosque, así que un poco de humildad antes de llamar idiotas a sus lectores!
Planta ornamental? La palmera canaria. Repito, la palmera canaria planta ornamental?. Fue un error plantar palmeras canarias en su momento?. Tener material para hacer la cestería de las labores agrícolas y pesqueras antes del plástico es visto hoy como un error? Parece que el microplastico ya se ha instalado en el cerebro de algunos.
Pues yo sí que he criticado durante años el abandono generalizado de las palmeras, sus podas ilegales, e incluso la pésima calidad de la educación que hemos recibido quienes hemos hecho el curso de poda de palmeras que exige el gobierno de Canarias, requisito para quienes quieran podar palmeras en esta comunidad autónoma. Con decir que la única forma de conseguir un certificado de prevención de riesgos laborales, necesario para la recibir la acreditación como podador de palmeras, era imprimiéndolo desde internet (damito.net), algo completamente legal e incluso recomendado por el profesor del curso de poda de palmeras, te lo digo todo. También critiqué las podas ilegales contratadas por los ayuntamientos, como los cepillados de estípite de las palmeras en la avenida de Playa Honda. Son tan ignorantes que hasta publicaron una nota de prensa con una foto del anterior concejal de parques y jardines de Arrecife mirando cómo se cortaban hojas verdes de palmera sin justificación válida, lo cual es delito desde el año 2007. No solo he hablado de palmeras, sino también de otros árboles, incluso protegidos, que se talan con la excusa de ser trasplantados. Árboles como el eucalipto protegido de Guatiza que "trasplantó" Jacobo Medina (algo que le desaconsejaron desde la granja agrícola) y fue a parar a un terreno vallado en Tías donde previsiblemente murió (más info en ventusarborum.com/guatiza). También unos ficus de la plaza Pedro Alcántara (plaza de la harinera), que acabaron como troncos secos clavados al lado del solar de Ginori. También critiqué las malas prácticas de poda en los ficus de la rambla medular de Arrecife (ventusarborum.com/itree), que aplicando la Norma Granada debería de haber resultado en cuantiosas multas contra Ferrovial, esa empresa a la que Arrecife paga más de un millón de euros al año y que debería haber hecho el proyecto de la red de riego pero no lo hizo. Años más tarde, el Cabildo tuvo que enviar 700.000€ a Arrecife para que elaboraran dicho proyecto, todo sin mencionar a Ferrovial. Tampoco escuchan cuando les recomiendo que no planten árboles con un diámetro de copa de hasta 30 metros a menos de 2 metros de la fachada de un colegio, en una calle de 10 metros de ancho. Pero plantan Ficus rubiginosa con raíces de contrafuerte en alcorques que no están diseñados para ello, a veces a menos de un metro de una farola. Luego habrá que cortarlos en una década porque tapan la farola o levantan la acera y se parten las tuberías, esas que han puesto al lado de las raíces sin el diseño necesario para resistir las fuerzas a las que previsiblemente serán sometidas esas tuberías. Eso por no hablar de las zanjas que abren al lado de árboles, desestabilizándolos y luego echando cemento en las raíces para que se mantengan en pie (ventusarborum.com/excavadora). Menos mal que todavía no le han metido mano a la Plaza de la Iglesia. Por muchos casos prácticos que les cite, los papers o libros que mencione, o los estudios que tenga, les da igual. Mientras, sale una ley de protección de arbolado excesivamente proteccionista que básicamente impide la correcta gestión del bosque urbano por prohibir toda tala de árbol con un tronco superior a 20 cm de diámetro, así que habrá que esperar a que esos árboles rompan las aceras para poder justificar su sustitución. Eso o hacer más talas disfrazadas de trasplante, tirando decenas de miles de euros a la basura. No es por ignorancia, es por pensar que se sabe. Te dicen que un círculo es redondo porque es evidente y no están dispuestos a escuchar cuando les dices que quizás se trate de una espiral y el problema sea su punto de vista. A todo eso hay que añadirle una ideología ecologista que glorifica al árbol y vilifica al ser humano, enfrentando lo natural con lo artificial como si lo artificial no fuese artificio de nuestro engreimiento como única especie capaz de crear algo artificial; como si hubiésemos caído del jardín del Edén. Y vemos esa simplicidad en este artículo, donde la motosierra se ve como una máquina para matar árboles. La motosierra es una herramienta que se puede usar tanto para talar un árbol como para hacer una poda estructural que evite que un árbol se parta en dos durante una tormenta. ¿Cómo vamos a salvar a la biosfera sin no somos capaces de identificar cómo la beneficiamos? ¿Cuánta gente puede enumerar los efectos positivos del ser humano sobre el resto de la biosfera? El problema de fondo es la mentalidad clivada, como si una motosierra (o varias, la última la del franquismo) nos hubiera dividido el mundo en blanco o negro. Huyen de la humildad de la duda, los matices, la complejidad, el misterio, etc. y se aferran a la soberbia de las ideologías simplistas donde cuestionar se confunde con negar y si no estás con nosotros, eres de los otros. Se podría reflexionar, pero es tal la precariedad laboral y la pobreza en esta isla (solo hay que comparar el salario medio con el alquiler medio) que la mayoría de la gente no tiene tiempo o fuerzas para ese ejercicio mental. Como la clase política está profesionalizada y los políticos necesitan conseguir el sillón para evitar la precariedad, buscan el voto allí donde esté y se convierten en partidos veleta que hacen todo lo posible por manipular a los medios de comunicación para que el mensaje siga siendo blanco o negro; umbría Ó solana. Algunos partidos incluso modifican sus estatutos de manera ilegal (ventusarborum.com/cc) para sobrepasar las líneas rojas que impedían un pacto, pero cuando aviso al resto de partidos, lo ignoran. Les gusta la estabilidad del conflicto actual y no quieren que su contrincante sea ilegalizado, no vaya a ocupar su lugar un partido inmune al "y tú más". ¿Es realista pensar que esto tiene solución en lo que nos queda de vida? Al final va a haber mucha sabiduría en los refranes "si no te gusta, te largas" y "es lo que hay". Hay esperanza para Lanzarote, pero ya no de evitar la hecatombe final, sino de conseguir atravesar el infierno de Dante.
Yo soy nacido en esta isla y he denunciado muchísimas veces el daño medioambiental que está sufriendo el parque de los volcanes, su masificación y descontrol de senderistas que suben y bajan por cualquier lado. En El Golfo suben la montaña del lago Verde, meten coches en las cunetas de Timanfaya para hacer la foto en la carretera, y un largo etc de los que ya estoy hasta los coj... De que cuando lo denunció se rían de mí y digan que es que vivimos del turismo. Pues toma turistas. Sigan promocionando cada rincón de la isla para que se llene de paleros con móviles y cámaras de fotos. Sigan sin poner control sobre el medio natural y sigan permitiendo que zonas como Famara se llenen de coches de lunes a domingo. Que les den.
Mister X, pues sí que ha dado de sí el articulo Salvajes todos. Pero debería seleccionar lo que desea decir. Sin quitarle razón, es una locura.
¿Por qué no lees antes de ponerte a despotricar? Por supuesto, las palmeras de borde de carretera y jardines a las que se refiere el artículo son plantas ornamentales! Y, en cualquier caso, todas las palmeras presentes en Lanzarote son plantadas, hasta las de Haría! Qué bonito es la apología de l ignorancia desde el anonimato!

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