La comunidad educativa del IES César Manrique ha acusado al Gobierno de Canarias de tomar “la decisión unilateral” de intentar “masificar el único centro de secundaria de atención preferente de alumnos con discapacidad motórica de la isla de Lanzarote”.

Según indican, “la intención del Ejecutivo autonómico para el próximo curso es incrementar de tres a cinco grupos de Primero de ESO, pasando de ser un centro de línea tres a uno de línea cinco, pudiendo verse afectada la impartición del Bachillerato”.

“Se trata de algo totalmente inaceptable al tener que velar por el cumplimiento de las condiciones de seguridad y movilidad de los alumnos motóricos, más aún cuando a tan solo 400 metros existe otro instituto con suficiente espacio para acoger a dichos alumnos, que ha perdido varios grupos de dicho curso”, señalan.

Además, consideran que con esta medida se incumpliría el decreto por el que se establecen los requisitos mínimos con los que han contar los centros que impartan las enseñanzas del segundo ciclo de Educación Infantil, Educación Primaria y Educación Secundaria.

Tanto el profesorado como los alumnos y padres del IES César Manrique entienden que “con esta incomprensible decisión se perjudica gravemente a los niños en silla de ruedas, andadores o muletas que han de desplazarse por los pasillos del centro”.

De esta forma, se añadiría “más dificultad a su día a día” y se iría “en contra de los principios de igualdad, normalización, compensación, equidad, integración e inclusión”. “Precisamente el próximo curso está prevista la incorporación de tres nuevos alumnos con algún tipo de discapacidad motórica”, apuntan.

Desde el centro se han mantenido conversaciones “sin éxito” con el director insular de Educación de Lanzarote, Mario Pérez, y se han enviado cartas a la directora general de Centros e Infraestructura Educativa del Gobierno regional, Ana Isabel Dorta; al director general de Ordenación, Innovación y Promoción Educativa, Jonathan Martín; y a la propia consejera del ramo, Soledad Monzón.