Los vecinos y vecinas del pueblo de Guatiza manifiestan públicamente su malestar por la actividad turística guiada con vehículos tipo buggies y quads, que circulan por el entorno rural y urbano “incumpliendo la Ordenanza Reguladora del Tránsito de Quads por el Término Municipal publicada en el BOP n.º 14, de 29 de enero de 2010”, señalan en un comunicado.

Señalan en un comunicado que la presencia “constante” de estas excursiones está generando “graves impactos medioambientales y paisajísticos en la zona, con erosión del suelo, destrucción de caminos rurales, alteración de senderos, afección a la biodiversidad, invasión de espacios privados y aumento de la contaminación acústica y del polvo en suspensión”. Además, añaden, este tipo de prácticas turísticas repercute directamente en la calidad de vida de los residentes, provocando “molestias diarias, especialmente en las horas de descanso y en las zonas residenciales”.

A la preocupación medioambiental se suma una situación cada vez más tensa en la convivencia, pues denuncian también episodios de malos comportamientos, insultos e incluso amenazas por parte de algunos participantes en estas rutas cuando se les llama la atención por circular de manera indebida o invadir espacios no autorizados.

Antes esta situación, las personas afectadas exigen al Ayuntamiento de Teguise la aplicación “estricta y urgente” de la Ordenanza Municipal que regula y restringe el tránsito de estos vehículos. Esta Ordenanza indica en artículo dos que se “pretende proteger las vías urbanas y en especial los caminos rurales del municipio a fin de protegerlos del deterioro que sufren por el paso de vehículos de estas características”. Este hecho “se incumple sistemáticamente cada día”, recalcan.

También piden el aumento de la vigilancia y control policial, “especialmente en los núcleos urbanos y zonas de especial sensibilidad ambiental”. Señalan que la norma reguladora indica en su artículo seis que las rutas y caminos que podrán ser utilizadas serán “rutas cuya superficie esté pavimentada con aglomerado asfáltico”, elemento que “demostramos con las imágenes adjuntas que no se realiza de este modo”.

En tercer lugar solicitan que se tomen “medidas firmes” para frenar una actividad que, “lejos de aportar un turismo sostenible, está deteriorando el patrimonio natural y cultural de Guatiza, y poniendo en riesgo la convivencia ciudadana”, exponen.

Los vecinos recuerdan que el turismo responsable debe ser compatible con la conservación del medio ambiente y el respeto a la población local, y que este tipo de actividades masivas en buggies resulta “incompatible” con dichos principios.

La presencia “constante”, dicen, de estas excursiones está generando un “grave impacto medioambiental y paisajístico” en la zona, con “erosión del suelo, destrucción de caminos rurales, alteración de senderos, afección a la biodiversidad, invasión de espacios privados y aumento de la contaminación acústica y del polvo en suspensión”.

“Además de todo ello, la negativa repercusión en la calidad de vida de los residentes debido a las molestias diarias, especialmente en horas de descanso, así como el estado de ansiedad emocional que nos genera la asiduidad en la que se repiten estas actividades”, añaden.

Los vecinos y vecinas, por último, explican que ya se han reunido “en varias ocasiones” para demandar al Ayuntamiento que actúe ante estas “graves infracciones”, incluso con la Concejal del área de Medio Ambiente, con la cual tienen pendiente una próxima reunión.