El investigador Alberto Ucero, en representación del Grupo de Investigación sobre la Hubara Canaria del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN – CSIC), presentó las alegaciones al borrador del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Archipiélago Chinijo (Lanzarote), cuyo proceso de participación ciudadana finalizó el pasado 4 de octubre.

Del documento de más de 25 páginas, donde Ucero expone una batería de alegaciones, destaca el informe realizado por el grupo de investigación del CSIC sobre las afectaciones al hábitat de la hubara debido a las extracciones de jable próximas a Muñique, zona donde se encuentra uno de sus núcleos más estables y con un mayor número de ejemplares, información obtenida tras el censo realizado en 2018 y los más de 40 ejemplares marcados con emisores, siendo casi toda la superficie de actuación del PORN hábitat de la hubara canaria.

Por lo que en dicho documento el grupo de investigación desaconsejan la extracción de áridos en la zona, e insta a las autoridades a adoptar las medidas que considere oportunas para garantizar una adecuada conservación de este espacio protegido, designado como Zona de Especial Protección Para las Aves (ZEPA).

Otras de las propuestas al PORN que ha realizado Ucero es el soterramiento de las líneas eléctricas y telefónicas que se encuentran dentro de los límites de actuación del PORN. El investigador asegura que existen varios estudios científicos que demuestran que los tendidos eléctricos causan la muerte de miles de aves de distintas especies cada año en Canarias.

En cuanto a la presión turística y el incremento en el número de vehículos, el investigador señala que en 2018 más de 5.300.000 turistas visitaron Lanzarote y Fuerteventura, lo que supone un aumento del 50 por ciento en los últimos seis años, mientras que La Graciosa recibe 502.344 turistas al año en una isla de apenas 29 km2.

Asociado al turismo que visita el Parque Natural está la construcción de apartamentos y villas, así como la demanda de coches de alquiler. Este problema se agrava en La Graciosa, donde el parque móvil ha experimentado un incremento hasta llegar a los 300 vehículos.

Entre las propuestas, Ucero sugiere impedir la especulación en los núcleos urbanos de Caleta de Famara, Caleta de Sebo y Pedro Barba, así como limitar el número de visitantes en La Graciosa y el número de coches que puedan circular.

En relación a las infraestructuras viarias, el investigador hace mención a un estudio científico que estima que en Lanzarote mueren atropelladas más de 7.000 aves al año, siendo esta una de las amenazas más importantes para la conservación de la hubara canaria.

Una de las medidas propuestas por el investigador para mitigar este problema es la implantación de medidas correctoras en tramos de carreteras con mayor probabilidad de atropellos.

Por último, el investigador afirma que el incontrolado aumento del número de gatos supone una amenaza para la población de las especies de aves de las islas Canarias, pudiendo ser esta la mayor amenaza en La Graciosa, por lo que se debe llevar a cabo un control riguroso de las poblaciones de gatos, así como una campaña intensiva para extraer los ejemplares asilvestrados del medio natural y concienciar a la ciudadana sobre la problemática que generan los gatos sin vigilancia, prohibiendo la entrada de nuevos gatos en la isla de La Graciosa.