La encuesta que vale es la de las urnas. Eso es lo que dice el manual básico de comunicación de los partidos políticos. Todavía quedan algo más de dos años hasta las próximas elecciones, pero los sondeos empiezan ya a marcar tendencias. Sirven para evaluar el impacto de las acciones del gobierno en la percepción de la ciudadanía y a calibrar las expectativas de la oposición. Una encuesta sobre el Cabildo de Lanzarote concluye que Coalición Canaria no logra consolidarse como fuerza hegemónica y perdería las elecciones.

Oswaldo Betancort cuenta con un claro viento de cola, las arcas a rebosar, dopadas con el aumento del reparto de la tarta del IGIC (casi 66 millones de euros), unos presupuestos de récord de más de 209 millones de euros para 2025 y una composición del pleno con contadas voces críticas tras el harakiri de los partidos a la izquierda del PSOE, que acudieron divididos en los últimos comicios y ese espacio político se ha quedado sin representación.

El sondeo estima que CC perdería más de 1.700 votos respecto a 2023

Sin embargo, una encuesta apunta a un retroceso de 3,23 puntos porcentuales de Coalición Canaria en el Cabildo, quedándose en el 26,3 por ciento, lo que le haría perder la primera posición, que se premia con la presidencia. Esta caída se traduciría en unos 1.711 votos menos, para un total de 12.679, y siete consejeros en vez de los ocho actuales.

La formación nacionalista sufriría la fuga de más del 17 por ciento de sus votantes y solo sería la primera opción para los mayores de 55 años. De los tres grandes partidos, es el que menos fideliza a sus electores (82 de cada 100), por detrás de PSOE (86 de cada 100) y PP (92 de cada 100).

El sondeo, elaborado por la empresa especializada Celeste-Tel, muestra que el PSOE, pese a perder casi un punto porcentual de respaldo, quedarse con el 28,4 por ciento de apoyos y 13.703 votos, le sacaría más de un millar de papeletas a Coalición. El Partido Socialista sería la opción mayoritaria para los electores entre los 18 y los 54 años. Tras el apretado final de la noche electoral del 28 de mayo de 2023, con solo 69 votos de diferencia, esta encuesta apunta a un cierto colchón para los socialistas, que también obtendrían siete consejeros –uno menos que ahora- pero recuperarían el bastón de mando.

El PSOE sería la opción mayoritaria para los electores entre los 18 y los 54 años

Otra tendencia de la encuesta, a la que ha tenido acceso Diario de Lanzarote, es la que marca un ascenso del Partido Popular, que pasaría de 8.531 votos a 9.719 papeletas, del 17,5 por ciento de apoyo al 20,2 por ciento, y de cuatro a cinco consejeros. La recogida de muestras para la investigación sociológica se efectuó en la recta final de 2024, con Jacobo Medina como líder popular en el Cabildo, antes de que Ástrid Pérez le degradase quitándole la vicepresidencia de la institución insular y, poco después, la secretaría general del partido.

Consejeros del grupo socialista del Cabildo. Foto: Cedida.

El insularismo

La encuesta plantea un escenario político que tiene altas probabilidades de materializarse en el próximo ciclo electoral: la irrupción de una nueva fuerza netamente insularista en Lanzarote. Tras obtener mayoría absoluta en las pasadas elecciones municipales en Yaiza, y de liderar una candidatura al Cabildo en alianza con Nueva Canarias, Óscar Noda siempre ha dejado la puerta abierta a promover una organización propia con implantación en el resto de municipios.

Casi un 60% considera que un partido insularista defiende mejor a Lanzarote

Casi un 60 por ciento de los encuestados consideran que un partido insularista, “cien por cien de Lanzarote”, puede defender mejor los intereses de la Isla. Una fuerza de esas características, liderada por el actual alcalde de Yaiza, conseguiría 3.775 votos, el 7,8 por ciento del total, y dos consejeros. Se convertiría así, de forma directa, en la cuarta fuerza política insular.

Noda cuenta, en principio, con una sólida base electoral en Yaiza, que le llevó a superar los 2.100 votos en las pasadas elecciones municipales. Aunque la traducción a escala insular nunca es automática, la sensación de que existe un nicho electoral vacío se detecta, también en el estudio sociológico. Son los más jóvenes, la franja de edad entre los 18 y 34 años, quienes más lo manifiestan, por encima del 66 por ciento. En el rango entre los 35 y 54 años casi un 62 por ciento también considera que un partido insularista sería una herramienta política positiva para los intereses de Lanzarote.

Óscar Noda, alcalde de Yaiza y consejero en el Cabildo.

Las incógnitas

Del resto de partidos, Nueva Canarias mantendría representación, aun en el escenario de que Noda articulase un proyecto con su sello a escala insular. La encuesta le da a NC unos 2.918 votos, el 6,1 por ciento del total, y un consejero. Así, perdería más de 1.400 votos, un 2,89 por ciento de apoyos a escala global y un acta en el salón de plenos. No obstante, las circunstancias no son las más propicias para el partido que lidera en Lanzarote el diputado Yoné Caraballo. En la práctica, no controla a ninguno de los dos consejeros del Cabildo: Noda siempre ha desempeñado el papel de líder de Unidos por Yaiza (UPY) en la alianza con NC, y Armando Santana, que fue durante años el hombre de Román Rodríguez en Lanzarote, terminó mal con el partido.

La encuesta da dos consejeros a un partido liderado por Noda, uno a NC y uno a Vox

La otra alianza de Nueva Canarias en las pasadas elecciones, con el Movimiento Renovador de Tinajo (MRT) de Antonio Morales, no ha significado mayor presencia real de la organización canarista. En el otro lado de la balanza, un concejal de NC, Marcos Lemes, gobierna en Haría. Y otro edil, Fernando Jiménez, en Teguise, hace labores de oposición. La presencia de Caraballo en el Parlamento, potenciada a través de las redes sociales, y el lanzamiento de propuestas en municipios como Arrecife, en los que no están dentro del Ayuntamiento, busca compensar el desequilibrio que supone el déficit de representantes públicos con obediencia al partido.

Vox y la izquierda

El sondeo de Celeste-Tel indica un cierto desgaste de Vox, que dispone de un consejero en la Corporación insular desde las pasadas elecciones, Óscar Pérez. Antes de aterrizar en Vox, lideró una agrupación electoral en San Bartolomé y mantuvo durante cierto tiempo una alianza con Coalición Canaria. El partido de extrema derecha acusaría desgaste en el Cabildo, pero mantendría el consejero con 2.809 votos, el 5,8 por ciento del total. Se dejaría menos de medio punto y sus votantes perdidos se dirigirían fundamentalmente al PP.

Uno de los grandes interrogantes es qué sucederá con los partidos de izquierda. En las pasadas elecciones, esa alternativa acudió fragmentada en tres opciones: Podemos, Lanzarote en Pie y Drago. Juntos sumaron más de 4.000 votos en el Cabildo, un millar más que Vox y cerca de Nueva Canarias. No sirvieron para nada porque ninguno obtuvo representación. En estos casi dos años de mandato, la presencia pública de esas tres fuerzas se ha apagado en Lanzarote. Más allá de que la formación morada mantiene un concejal en Tías, Nicolás Saavedra, no se han apreciado signos de una posible refundación de ese espacio político, que llegó a contar con hasta cinco consejeros: tres de Podemos y dos de Somos.