ENTREVISTA

“No tener impuesto de construcción es un lujo que no nos podemos permitir”

José Juan Cruz, alcalde de Tías

Foto: Adriel Perdomo.
M. Riveiro 5 COMENTARIOS 23/11/2020 - 06:19

-¿Cómo es la situación del municipio de Tías con la crisis derivada de la COVID y la capacidad de respuesta del Ayuntamiento?

-La emergencia sanitaria lo cambió todo. Iniciamos el año con un presupuesto con 27 millones de ingresos y 25 millones de gastos, con el que empezamos a planificar y organizar el Ayuntamiento. Se trata de un presupuesto social, enfocado a la gente, a las familias y a los vecinos que peor lo estaban pasando, pero lo que nos ha tocado vivir en estos últimos ocho meses ha sido una crisis nunca vista. Al menos, desde que se inició la actividad turística en la Isla hace 55 años, no habíamos vivido algo similar, con un cierre total y una economía en el municipio, que depende fundamentalmente del turismo, prácticamente paralizada. Parece claro que los objetivos de recaudación no se van a ver cumplidos.

-En este contexto, ¿tiene el Ayuntamiento de Tías capacidad inversora?

-En lo que va de mandato hemos sacado 31 pliegos de contratación para obras, dando prioridad a aquellos proyectos que cuentan con financiación afectada, es decir, que procede del Gobierno central, del Gobierno de Canarias o del Cabildo de Lanzarote. Hemos tenido que solicitar, en algunos casos, prórrogas para cumplir con los plazos por culpa de la ralentización, debido a la crisis sanitaria, y hubo casi 100 días, entre mediados de marzo y junio, donde se paralizaron los plazos de tramitación. En estos momentos hay que priorizar, pero tenemos claro que vamos a poner en marcha todos los proyectos que estaban previstos.

-¿Ha notado el Ayuntamiento un aumento de la demanda de atención por parte de los ciudadanos de Tías, en estos meses de pandemia?

-Para la administración pública, la pandemia ha supuesto un antes y un después, y no solo por la constante actualización que ha habido que hacer para adaptarnos a normativas en constante cambio y a los protocolos a seguir. Mire, desde el 25 de mayo hasta la actualidad, el Ayuntamiento de Tías ha atendido a 9.000 personas, que se dice fácil. Son datos que conocemos gracias al sistema de cita previa, algo que viene para quedarse.

“Desde mayo el Ayuntamiento ha atendido a 9.000 personas, que se dice fácil”

-¿Se ha visto desbordado el Área de Servicios Sociales por esta situación?

-Es un hecho que hay que reforzar Servicios Sociales. Ya teníamos un presupuesto social, pero la realidad es que atendíamos a unas 80 o 90 familias, y ahora atendemos a unas 570 familias. Hubo un momento, cuando se empezaron a tramitar los Expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), que Tías fue el municipio con más solicitudes, hasta que llegaron esas remuneraciones, que se produjo un repunte y se superaron las 560 familias atendidas. Luego se produjo un descenso y ahora se ha vuelto al nivel que apuntaba antes. La realidad de todo el municipio no es la misma. El 76 por ciento de las ayudas sociales se conceden en Puerto del Carmen, que tiene 12.000 residentes. De ese 76 por ciento, el 50 por ciento no son españoles. En Tías, con unos 6.000 residentes, se concentra el 18 por ciento de las ayudas, mientras que en los núcleos rurales, como Mácher, La Asomada, Conil, Masdache y Tegoyo, donde tenemos 3.000 residentes, apenas se localiza el cinco por ciento de las ayudas. Hay que destacar que en el ámbito rural suele haber estructuras familiares más amplias, más arraigadas, que funcionan como una red de apoyo.

-¿Qué recursos está poniendo en marcha el Consistorio ante las peticiones de ayuda por parte de los vecinos?

-Desde el inicio de la emergencia sanitaria se han recibido 70 toneladas de alimentos y un montón de toneladas sin cuantificar del todo, que nos donaron los establecimientos alojativos cuando tuvieron que cerrar sus puertas. Como en la anterior crisis económica, hemos montado el cuartel general en la sede de Cáritas en Puerto del Carmen y se ha involucrado tanto el personal de Servicios Sociales, como voluntarios y efectivos de Protección Civil para atender a las personas que demandan atención alimentaria. Además de la alimentación, la principal solicitud de los vecinos pasa por ayudas a la vivienda, donde se han disparado las peticiones. También hemos ayudado a tramitar unas 160 solicitudes para el Ingreso Mínimo Vital. Como estábamos desbordados, se efectuó un curso de formación para ayudar a hacerlo y la información que tenemos es que están llegando las prestaciones con efecto retroactivo desde mediados de junio.

“Además de la alimentación, la principal demanda son las ayudas a la vivienda”

-¿Cómo encara el Ayuntamiento de Tías lo que queda de año y 2021, que está a la vuelta de la esquina?

-Hacemos un esfuerzo importante en la parte social, que habrá que intentar reforzar. Le doy unos datos: tenemos en el presupuesto unos 776.000 euros para ayudas en Servicios Sociales, de los que 537.000 son para cuestiones como alimentos, alquileres, agua y luz, de las que ya llevamos gastados más de 418.000 euros. Destinamos otros 352.000 euros a la atención a domicilio para la tercera edad, y 487.000 euros en personal del departamento. A nivel general, el problema del próximo año va a ser cuadrar el presupuesto. Por las previsiones que nos llegan, de transferencias, procedentes del Gobierno central y de la comunidad autónoma, va a ser complicado. Y muchas acciones que asumía el Ayuntamiento antes del estado de alarma de marzo probablemente no se puedan recuperar a corto plazo, básicamente por falta de personal. De plantilla tenemos 180 trabajadores, de los que 50 son policías, 36 funcionarios y 95 laborales. Hay cinco nuevas plazas para agentes de la Policía Local, que son importantes, y tres plazas de oficial, estas últimas en litigio. Ahora, con el mismo personal hay que cumplir más protocolos. Le pongo un ejemplo: antes cualquiera entraba al Ayuntamiento, ahora hay tres trabajadores en la entrada. Antes la limpieza se hacía por la tarde, ahora hay que hacerla también por la mañana. En general, hay más carga de trabajo. La clave es priorizar lo importante.

-¿Y cuáles son las prioridades del Ayuntamiento?

-Entre otras cuestiones, los planes de empleo social. Con uno de ellos recuperamos el albergue de Tegoyo y su entorno, que estaba hecho un vertedero y homologamos el albergue. Hemos tramitado tres planes de formación y alternación con el empleo, por un millón de euros, y tenemos a 60 personas -45 alumnos y 15 profesores- formándose y trabajando durante once meses. Uno de los planes es de limpieza, otro de albañilería y otro de jardinería. También nos hemos acogido a tres convenios de empleo, dos de ellos con el Gobierno, por 200.000 y 300.000 euros, respectivamente, y viene otro del Cabildo por 200.000 euros. El objetivo es darle cobertura a muchas personas que están en el paro, especialmente en las casas en las que nadie trabaja. Hay que tener en cuenta que en el municipio prácticamente hemos duplicado el número de desempleados y el paro afecta a unas 2.000 personas. Estamos poniendo en marcha huertos comunitarios, para orientar a quien se quiera iniciar en ese terreno, hemos lanzado ayudas para rehabilitar viviendas y también sacamos el proyecto Reflota, para asesoramiento a cooperativas.

“Con los planes de empleo, que son prioritarios, recuperamos el albergue de Tegoyo”

-Apuntaba antes que se prevén menos ingresos a las arcas públicas. ¿Cómo se pueden cuadrar las cuentas?

-El Ayuntamiento de Tías no tiene deuda, pero el gasto corriente hay que gestionarlo con ingresos ordinarios. No resuelve nada pedir una póliza de crédito para tener liquidez porque hay que devolverla antes de que finalice el año. Las previsiones no son buenas. Del bloque de financiación canario se espera una disminución de entre el 22 y el 30 por ciento. Eso supondría unos ingresos de cuatro millones, alrededor de 1,2 millones menos. De los fondos procedentes del Estado, que son otros tres millones, también se esperan recortes. Con este escenario, es verdad que el Ayuntamiento tiene un remanente de 4,5 millones, que lo tenemos reservado, como si fuera un colchón. También tenemos otro colchón de más de dos millones del canon que han pagado los empresarios por obras de los planes de modernización, que se tienen que invertir en Puerto del Carmen.

-¿Se verá abocado a subir los impuestos municipales?

-No es nuestra intención, pero sí cuadrar el presupuesto, reestructurando los ingresos y dando facilidades a los vecinos. En ese sentido, hemos adaptado nuestra normativa a la Ley de Segunda Oportunidad, para permitir al contribuyente renegociar su deuda. Antes, si fallabas con un plazo, tenías un problema serio. Hay quien pide aplazamientos de deuda pero tampoco puede cumplir, la domiciliación bancaria, que tiene una bonificación del cinco por ciento, solo se permitía para el IBI… ahora se permitirá para todos los tributos. Y también se efectuarán planes personalizados de pago. Por ejemplo, hay quien quiere pagar todos los meses un poco en vez de que le llegue todo junto y sea una carga mayor. Si un contribuyente tiene que pagar 600 euros al año, a lo mejor prefiere pagar 50 euros todos los meses. Eso antes no lo podía hacer. Nuestra estrategia fiscal pasa por incentivar la actividad y, por ejemplo, se ha eliminado la tasa por ocupación de vía pública para mesas y sillas. Pero no tenía sentido haber quitado el impuesto de construcción.

“Atendemos a más de 570 familias, cuando antes de la pandemia eran unas 80”

-¿Se volverá a implantar?

-Tías es el único municipio de Canarias que había quitado el impuesto de construcción. Como consecuencia de eso, el Ayuntamiento no tiene superávit. Con un cálculo rápido, solo con cuatro o cinco obras grandes en Puerto del Carmen las arcas públicas dejaron de ingresar entre dos o tres millones de euros. Ese lujo no nos lo podemos permitir. Se pondrán medidas para facilitar el pago del impuesto, pero se volverá a implantar, igual que lo tienen el resto de ayuntamientos. Hay empresarios que han invertido 30 millones y no han pagado nada al Ayuntamiento; ha pagado más el vecino por venir a sacar un certificado de residencia. Le pongo un caso real: un hotel de Matagorda que está en reformas, con una inversión de unos 15 millones en obras. Con un impuesto de construcción del 2,5 por ciento, que es lo que menos se cobra en Lanzarote, al Ayuntamiento le corresponderían 375.000 euros. Los impuestos tienen que ser justos y servir para financiar los servicios públicos y atender a quienes más lo necesitan. Por eso, la ordenanza tendrá una condición: si usted va a hacer su primera vivienda, se le bonifica un 95 por ciento.

“Solo con cuatro o cinco obras por las que no se cobró, se perdieron unos dos millones”

-En las actuales circunstancias, ¿es posible retomar iniciativas como sacar a concurso la gestión de la piscina municipal?

-De la piscina municipal sacamos a información pública un estudio económico, elaborado antes de que estallara la pandemia. No tiene sentido proceder a la licitación en este momento, con esas condiciones. La información que nos llega sobre este tipo de instalaciones es que en Gran Canaria sus ingresos han caído un tercio, y más en Lanzarote y Fuerteventura, donde están incluso peor. Si sacamos la licitación y no se presentan empresas especializadas quedaría desierta. Pero nuestra intención es abrir la piscina, donde se ha hecho una inversión millonaria, para que practique deporte no solo quien esté federado o en algún club sino el usuario que vaya por libre. Por eso estamos analizando otras fórmulas distintas a una licitación completa de toda la gestión de las instalaciones.

Comentarios

Mi titular seria : "Tener esta clase política, es un lujo que no nos podemos permitir". Tenemos una clase política y entorno, que no han gestionado nada en su vida ( y menos de forma exitosa ), ademas de estar mas interesados en problemas internos de poder y partidos ( véase Haria ) que en solucionar y dar respuesta a los ciudadanos.
Tener turistas que vienen a usar todas nuestras instalaciones, saneamiento, carreteras, residuos,...gratis. tampoco nos lo podemos permitir. Tasa medioambiental turística ya!! Como en muchas ciudades europeas. Porque somos europeos verdad?
Tener turistas que vienen a usar todas nuestras instalaciones, saneamiento, carreteras, residuos,...gratis. tampoco nos lo podemos permitir. Tasa medioambiental turística ya!! Como en muchas ciudades europeas. Porque somos europeos verdad?
Por qué no un impuesto al aire? Todos esos test en los aeropuertos cuestan dinero para que el aire no tenga virus. ¿Podemos permitirnos no tener un impuesto al aire? estamos dejando millones sobre la mesa. Pero no se dan cuenta los políticos que si extraen mas dinero de la sociedad la economía va a ir a peor? Optimizen los recursos que tienen, empezando por poner a dieta al ayuntamiento.
Y tener 11 concejales cobrando un pastizal si es un lujo que se pueden permitir los ciudadanos de Tías.

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