En matemáticas, el conjunto vacío es aquel que no posee elemento alguno. “Puesto que lo único que define a un conjunto es la propiedad que satisfacen sus elementos, el conjunto vacío es único”, dice la Wikipedia. En el lenguaje es diferente. El conjunto se diferencia de forma sustancial del discurso vacío en que este sí tiene elementos, pero carecen de significado. O mejor dicho: su significado no es literal. Mientras que el conjunto vacío es único, el discurso vacío se adapta a las características de cada persona, tiempo y lugar. Es la misma diferencia que hay entre las familias felices y las infelices, como dice el principio de Anna Karenina, que no es un principio matemático sin literario: “Todas las familias felices se parecen unas a otras, pero cada familia infeliz lo es a su manera”.

El mundo empresarial es el más avanzado en esto del discurso vacío. Se decora la nada con palabras como eficiencia, implementar, entorno, flujo, estrategia, optimizar o posicionamiento, pero se trata de comprar y vender, como toda la vida. Siempre es aconsejable, por supuesto, alguna expresión en inglés.

Hay que dotar de tecnicismos a la economía para que parezca que es una ciencia. Antes de la aparición de los negacionistas, la ciencia tenía más prestigio. Imagínense: yo estudié Ciencias de la Información y aquí estoy, escribiendo artículos. No entendí nada. Ahora se llama solo Comunicación porque mantenerlo como ciencia no colaba.

Pero si hay un reino donde triunfa el discurso vacío es el de la sostenibilidad. Decore usted la nada con sostenibilidad y túmbese a disfrutar del éxito. El turismo sostenible, por ejemplo, un oxímoron de gran éxito, también llamado el Yeti del turismo.

En Lanzarote somos pioneros: primero en turismo, después en sostenibilidad y ahora en discursos vacíos. Hace unos meses, la presidenta del Cabildo asistió al bautizo de un avión de Iberia con el nombre “Lanzarote”. El CEO de la compañía aérea dijo esto: “Lanzarote e Iberia Express compartimos el compromiso de seguir creciendo y estrechar aún más nuestros lazos, para impulsar la recuperación con el foco puesto en la sostenibilidad”. Crecer y sostenibilidad en la misma frase: eso es audacia. Pero es que la presidenta del Cabildo no se quedó atrás y agradeció a Iberia “no solo que a este avión moderno e innovador le hayan denominado 'Lanzarote', sino que además le hayan puesto el nombre de nuestra Isla al modelo más sostenible de toda su flota, mostrando Iberia Express una gran sensibilidad y alineándose totalmente con la esencia de sostenibilidad y respeto al medio ambiente que caracteriza nuestro modelo insular, herencia del lanzaroteño universal César Manrique”. No se olviden que estamos hablando de un avión.

Y como no podía ser de otra manera, de Fitur la presidenta se ha venido con varios éxitos en sostenibilidad. Uno: “Lanzarote se consolida como destino seguro y sostenible en la inauguración de Fitur 2022”. Palabras de la presidenta: “Estamos en uno de los mayores escaparates turísticos del mundo y queremos aprovechar la oportunidad para mostrar a nivel internacional nuestro compromiso y trabajo por la sostenibilidad del sector”. Otro: “Lanzarote se incorpora a la Asociación de Regiones Europeas para la Sostenibilidad y la Competitividad”. Otro oxímoron: sostenibilidad y competitividad.

El conjunto vacío, en matemáticas, tiene una ventaja: hay un símbolo, un cero con una línea oblicua que lo cruza, que lo determina. Para los discursos vacíos, habrá que implementar una estrategia con el objetivo de desarrollar un entorno para crear un nuevo branding con identidad corporativa propia. En fin, que nos salte una alarma que nos avise: “Cuidado, está asistiendo usted a un discurso vacío”.