En los últimos cuatro años las denuncias de violencia de género que han llegado a los juzgados de Arrecife han sufrido un importante incremento llegando a duplicarse  en 2017, ejercicio en el que se acercaban ya al medio millar, en concreto, 480, frente a las 252 denuncias de 2014, según los datos estadísticos del Consejo del Poder Judicial.

La evolución refleja este cambio en el comportamiento de las denuncias de violencia de género, sumando un centenar de ellas más por cada año transcurrido durante los dos siguientes ejercicios. Así, en 215 las estadísticas señalan que fueron 366 las denuncias registradas, mientras que en el año 2016 sumaron 460 hasta incrementarse en el pasado año y alcanzar las 480 denuncias, la mayor cifra en los últimos nueve años.

La mayor parte de estas denuncias, en concreto 303, parten de los atestados policiales tras la denuncia de la propia víctima frente a las 143 que tuvo que interponer la Policía de manera directa. Asimismo, 34 denuncias fueron realizadas tras un parte de lesiones. La forma en que estas denuncias llegan a los tribunales ha sufrido su propia evolución en los últimos años.

Denuncias de la propia víctima

Así, en 2014 con tan sólo 242 casos que alcanzaron los juzgados de Arrecife, más de dos tercios de las mismos se produjeron por mediación de las víctimas, sin embargo en los dos años siguientes la mayoría de las denuncias se realizaron por intervención directa de la policía o con motivo de un parte de lesiones para volver a la actualidad donde los atestados policiales con denuncia de la víctima vienen a representar el grueso de los casos.

En materia de atención a las víctimas de violencia de género, Lanzarote dispone del Centro de Atención a la Mujer (CIAM), gestionado por el Cabildo de Lanzarote. Donde han sido atendidas 247 de las víctimas del pasado año. Este servicio cuenta con una casa para capacidad para 22 mujeres, y ahora mismo está ocupada con tres inquilinas con sus hijos, pero por la misma han pasado ya en 2017 hasta 12 mujeres con ocho niños. Existe también un centro de acogida inmediata para mujeres víctimas de violencia de género como primer paso tras la actuación policial y por la que han pasado 25 mujeres y 15 niños.