Lanzarote cerró el año 2020 con un total de 18.297 parados, lo que supone un incremento del 61,4 por ciento con respecto al final de 2019.

La crisis derivada de la pandemia de coronavirus ha destruido al menos 6.958 puestos de trabajo en la Isla.

A ello hay que habría que añadir los trabajadores que se encuentran acogidos a un Expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que finalizan el 31 de enero y se está a la espera de si el Gobierno central acuerda una prórroga.

Con todo, diciembre no fue un mal mes para el empleo y la destrucción de puestos de trabajo se contuvo. De hecho, se acabó el mes con tres parados menos que en noviembre.

Eso sí, 2020 ya es el peor año en la historia reciente de Lanzarote en términos de desempleo. El anterior récord se produjo en 2012, con 17.251 parados, cuatro años después de que estallara la crisis del ladrillo.

En cuanto a la contratación, en diciembre se firmaron 2.029 contratos, un 59 por ciento menos que el mismo mes del año pasado.

En todo 2020 se formalizaron 29.577 contratos laborales, la cifra más baja de los últimos 20 años en la Isla. El anterior récord negativo se produjo en 2009, con 39.181 contratos.