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Hacer turismo donde otros hicieron cine

Fotocromo de la película ‘Oro Rojo’, dirigida por Alberto Vázquez-Figueroa. Imagen cedida por Saúl Rojas.
Saúl García 0 COMENTARIOS 12/11/2017 - 08:03

El ejemplo más claro “y quizá el más famoso”, señala María Cañada, es el de Nueva Zelanda y la saga de El Señor de los Anillos. “Este país, en el apartado de '¿Qué hacer?' de su página web tiene una entrada completa dedicada a la Casa de la Tierra Media, dejando ver al turista un pequeño atisbo de lo que puede encontrarse que tenga que ver con las películas de El Señor de los Anillos y El Hobbit; permite realizar una visita virtual de 365 grados, un test de personalidad para ver qué personaje de las películas sería el turista y una sección que muestra a los visitantes la posibilidad de realizar tres rutas...”.

Pero también hay otros, como Escocia, con rutas organizadas por los rodajes de películas como El Código Da Vinci o Harry Potter, Los Angeles, Vancouver o Croacia, que recibió en 2014 un 17 por ciento más de turistas, en parte por el impulso de las localizaciones de Juego de Tronos. En España, señala Cañada, los pueblos donde se rodó esta serie de HBO también están atrayendo la visita de fans.

María Cañada presentó el pasado mes de junio su trabajo de Fin de grado en la Escuela de Turismo de Lanzarote. El trabajo, con el título ‘Turismo cinematográfico como elemento de atracción de un destino turístico. El caso de Canarias’, obtuvo una nota superior al 9 y tuvo como tutor a Pedro Calero. María, aficionada al cine, ya había hecho durante la carrera un trabajo previo sobre turismo de cine y considera que este tipo de turismo puede servir para que se diversifique la oferta complementaria en las Islas. “No es tanto que haya turistas que vengan sólo por eso, sino que, una vez que ya están aquí, pueden visitar las localizaciones”, dice.

En su trabajo afirma que “desde sus orígenes, el cine y el turismo han estado indiscutiblemente ligados”, y que las localizaciones cinematográficas de Canarias se pueden aprovechar como reclamo turístico, por ejemplo “a través de una página web que detalle los entresijos de los rodajes que han tenido lugar en las Islas”.

La propuesta final del trabajo es la realización de una web, o blog, o guía de viaje donde se incluyan esas localizaciones y que recopile toda la información existente e interesante sobre las películas que se han rodado en Canarias, “el punto exacto donde esto ha tenido lugar y que explique un poco más de las zonas de rodaje que no son conocidas normalmente por los visitantes de las Islas”. En su trabajo, María incluye, con fotografías, una gran cantidad de localizaciones de películas rodadas en el último medio siglo en cinco de las siete islas.


Fotocromo de la película ‘Timanfa. Amor prohibido’. Imagen cedida por Saúl Rojas.

María Cañada propone en su trabajo de Fin de Grado aprovechar las localizaciones de los rodajes en Canarias como una visita que complemente la oferta turística de las Islas

Entre el apartado de conclusiones dice que “es asombrosa la cantidad de películas que se han rodado en el Archipiélago (…) lo cual ha sido bastante positivo para la economía de las Islas”, pero también dice que “sin embargo, la información sobre las localizaciones de cine en las Islas no está del todo clara y no hay una manera fácil de que el turista que acude a las Islas sepa que en una u otra tuvieron lugar distintos rodajes”. Ahora, según Cañada “funciona más el boca a boca que cualquier otra cosa”.

Esa lista de películas se está aumentando cada día, ya que en los últimos años, Canarias ha acogido rodajes de grandes producciones, como la serie Black Mirror o la película Allied en Gran Canaria, Exodus y Star Wars (que aún no se ha estrenado) en Fuerteventura o In the heart of the sea en El Hierro y Lanzarote. Precisamente, uno de los rincones de cine preferidos de María está en El Golfo, donde se rodó esta cinta sobre Moby Dick, que reconoció al instante en cuanto lo vio en pantalla. El Charco de los Clicos también es uno de los lugares más reconocidos por los aficionados al cine, por la película Los abrazos rotos, “y también Famara -dice María- que sale de una manera u otra en muchas películas”.

En su trabajo concluye que “las entidades de promoción turística de diversos países y ciudades se han percatado de la importancia de la combinación cine-turismo y utilizan este recurso para animar al turista a visitar el país desde sus páginas web oficiales”. Eso sí, el límite que advierte María es el de evitar la masificación que puede llevar a un posible deterioro de algunas de esas localizaciones.  


Fotocromo de la película ‘Enemigo mío’, protagonizada por Dennis Quaid. Imagen cedida por Saúl Rojas.

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