El Juzgado de Instrucción número 3 de Arrecife ha citado a declarar a la exconcejal Dácil Garcias, portavoz del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento capitalino en el pasado mandato, por la presunta usurpación de la identidad de una compañera de partido.

El nuevo titular del Juzgado, el magistrado José Luis Ruiz Martínez, ha dictado un auto, en el que Garcias aparece como investigada, y en el que se le cita para que preste declaración el próximo 19 de febrero.

El procedimiento penal se encuentra en fase de instrucción. Tal y como se refleja en el auto, en la causa se investiga un presunto delito de usurpación de personalidad, castigado con pena de prisión de seis meses a tres años.

Además, en el citado auto judicial, fechado el pasado 8 de octubre, también se menciona un presunto delito de alteración de datos informáticos, que del mismo modo está castigado con pena de seis meses a tres años de cárcel.

Según ha podido saber Diario de Lanzarote, el origen del caso se encuentra en una supuesta conversación a través de una aplicación de mensajería, en la que presuntamente Garcias se habría hecho pasar por una compañera de partido, dejándola en mal lugar.

Dácil Garcias fue la número dos del PP en la plancha encabezada por Astrid Pérez en las elecciones de 2015. Con el partido en la oposición y Pérez compaginando tareas de concejal y diputada autonómica, Garcias ejerció de portavoz en el Ayuntamiento de Arrecife durante el pasado mandato.

Sin embargo, en las pasadas elecciones ya no formó parte de la lista electoral del PP en la capital. Su partido, a escala insular, la propuso para que formara parte de la lista al Congreso de los diputados por la provincia de Las Palmas, un puesto que finalmente ocupó Francisco Cabrera. En aquel entonces trascendió que se trataba de una decisión de la dirección nacional del PP. Tras las elecciones, en junio, Garcias pidió la baja como afiliada del PP.

En declaraciones a Diario de Lanzarote, Garcias sostiene que le “llegaron unos mensajes” en los que la criticaban. La persona que se los envió se habría hecho pasar por la entonces directora insular de Bienestar Social, María Jesús Tovar, número dos del PP en Arrecife en las pasadas elecciones locales.

En el procedimiento judicial se tendrá que dilucidar si fue la propia Garcias quien presuntamente envió los mensajes. “Ya ni sé quién me había mandado los mensajes y sinceramente no me acuerdo”, aseguró este jueves, desvinculándose de los mismos.

La exportavoz del PP en Arrecife ha reducido a “tontería”, “chorrada” y a “cosas de patio de colegio” el contenido de esos mensajes y ha asegurado que ya entonces “tenía pensado” marcharse del partido.

Esa supuesta conversación ficticia, dentro del Partido Popular, se ha interpretado en el sentido de que Garcias la habría tratado de utilizar para influir internamente. La formación política estaba viviendo en aquellos momentos el proceso previo a la elaboración de las listas electorales.