La Dirección General de Comercio del Gobierno de Canarias ha remitido un escrito a la alcaldesa del Ayuntamiento de Arrecife, Eva de Anta, en el que le solicita la apertura “sin restricción” al tráfico de sur a norte en la Avenida Marítima de la ciudad.

El organismo autonómico, en respuesta a las quejas de las organizaciones empresariales de la Isla, ha recordado al Consistorio que los informes técnicos del Plan Director de la Zona Comercial Abierta de Arrecife y del propio proyecto proponen establecer una vía abierta a todos los tráficos con unas dimensiones de cuatro metros de ancho en un solo sentido, para permitir el acceso desde el sur, por donde acceden la mayoría de vehículos a Arrecife, hacia el norte, y entrar a los aparcamientos de la zona del Charco de San Ginés y a la nueva zona comercial de la Marina, “sin restricciones en el acceso”.

Desde el organismo autonómico se recuerda en el escrito que el planteamiento del plan director ya se había remitido por escrito a la consejera insular de Comercio, al presidente del Cabildo y a la propia alcaldesa, y que sin embargo, “lo que se ha llevado a cabo por el Ayuntamiento es el modelo de circulación con restricción de tráfico para vehículos autorizados, que estaba previsto, pero para el final del plan director”.

Incumplimiento del plan director

Sin embargo, le recuerda al Consistorio que no se han llevado a cabo el resto de medidas propuestas en ese mismo plan en cuanto a establecer las condiciones previas óptimas que faciliten la movilidad en la zona comercial abierta.

Además, se advierte al Ayuntamiento de las consecuencias negativas de esta opción implantada y que puede suponer “que se cuestionen las restricciones de tráfico conseguidas con la obra y por tanto el inicio del correspondiente expediente de reintegro de los fondos” del programa para la potenciación de zonas comerciales abiertas de canarias.

La Dirección General de Comercio recuerda que la peatonalización progresiva propuesta en el plan director, como estrategia de movilidad a aplicar en esta zona ha de tratarse con medidas que los usuarios puedan ir asimilando, por lo que la implantación de la restricción de tráficos rodados puede ser negativa y producir un efecto contrario al deseado.