La Asamblea General del Consorcio del Agua de Lanzarote, celebrada este miércoles en el Cabildo, ha aprobado un “plan de choque inmediato” para dar respuesta a los problemas en la red de abastecimiento de agua de la Isla a fin de reducir las pérdidas y mejorar la producción y almacenamiento.

Esta iniciativa se enmarca dentro del Plan de Actuaciones de Infraestructuras para el abastecimiento de agua potable en Lanzarote y La Graciosa, presentado por el nuevo grupo de gobierno, “el cual buscará poner fin a la situación crítica del ciclo integral del agua en las islas”.

En la Asamblea General del Consorcio del Agua de Lanzarote, constituida en Junta General de INALSA, se ha acordado con los ayuntamientos y Canal Gestión la ejecución de este plan, de manera que se acometerán de urgencia acciones para renovar la red de abastecimiento en las 38 calles con más averías, entre otras actuaciones que se desarrollarán entre 2023 y 2027.

El presidente del Cabildo de Lanzarote, Oswaldo Betancort, destacó "la importancia de la colaboración interadministrativa para sacar adelante este proyecto, mediante el cual se dará respuesta a las grandes dificultades para asegurar la producción y distribución del agua en la Isla de Lanzarote y La Graciosa".

"Se precisa de forma inmediata la ejecución de diversas actuaciones para paliar los graves problemas actuales, entre estos, el suministro de La Graciosa y otras actuaciones para reducir los cortes de agua en varios puntos de la Isla", apuntó el presidente.

En esta línea, el consejero de Aguas, Domingo Cejas, explicó que "las obras incluidas en la medida denominada 'Renovación de la red de abastecimiento de agua de las calles con mayor número de averías' consisten en intervenciones en la red abastecimiento de agua existente que transcurren, en su mayoría, por viales en suelo urbano.

Las actuaciones de emergencia y ejecución inmediata tienen por objeto reducir inmediatamente el riesgo de desabastecimiento actual mediante acciones sobre el sistema de producción de agua potable, sobre los depósitos de almacenamiento, sobre la gestión de las redes de abastecimiento, sobre la capacidad de producción de agua regenerada y sobre la sensibilización de la población.

Los trabajos más importantes consistirán en la gestión remota de presiones de red, campañas de sensibilización para el consumo responsable, campañas de detección de fugas, renovación de las infraestructuras en las calles con más averías, aumento de la capacidad de almacenamiento mediante puesta en servicio de depósitos, renovación de la red submarina de transporte a La Graciosa, incremento de la capacidad de producción de agua regenerada e instalación de desaladoras portátiles, entre otros.