El Congreso de los Diputados ha aprobado una Proposición no de Ley (PNL) del Grupo Parlamentario Socialista, defendida por la diputada canaria Ariagona González, en la que insta al Gobierno de España a realizar modificaciones en la normativa para permitir que las instalaciones de energías renovables asociadas a grandes consumidores, como las desaladoras, puedan verter a la red su producción de autoconsumo, aún en el caso de no tener permisos de acceso y conexión, para satisfacer la orden de interrumpibilidad y contribuir con ello a garantizar el mantenimiento del suministro eléctrico. 

De esta manera se podría aprovechar la totalidad de la producción energética renovable para garantizar el abastecimiento de la demanda eléctrica en aquellos casos en los que se tiene que satisfacer la orden de interrumpibilidad contratada con Red Eléctrica España para atender a una punta de consumo extraordinaria o a una pérdida de generación eléctrica.

"Nadie duda hoy en día de que el cambio climático y el aumento del estrés hídrico que se augura en países como el nuestro hace necesario ahorrar, reutilizar y buscar fuentes alternativas de agua", ha señalado la diputada. 

En el caso concreto de Canarias la diputada ha defendido que sus sistemas eléctricos aislados e interconectados necesitan la implantación del servicio de interrumpibilidad que ejerce Red Eléctrica España, el cual se activa en respuesta a una orden de reducción de potencia dada por Red Eléctrica. 

Tal y como establece la actual normativa, a través de la orden ETU/1282/2017, en el caso de una orden de interrumpibilidad, la instalación de generación asociada debe mantener su producción y verter a red, lo que resulta incompatible con el autoconsumo sin excedentes.

En este sentido, la diputada defiende que con esta PNL el Gobierno tiene la obligación de realizar las modificaciones necesarias para solventar la incompatibilidad normativa y permitir que los parques eólicos unidos a desaladoras que hay en Canarias, donde toda la energía producida es consumida al desalar el agua, puedan verter su producción en un momento determinado a la red.

La diputada canaria ha recordado que la primera planta desaladora de España se instaló en Lanzarote en 1964, una infraestructura sin la cual no se hubiera cubierto la necesidad de prestar servicios de calidad a una sociedad en desarrollo.

A fecha de hoy, operan en España más de 800 plantas desaladoras, que producen alrededor de cinco millones de metros cúbicos de agua desalada al día, representando el consumo energético entre un 50 y un 60% de sus costes de producción.