El fundador y líder histórico del PIL, Dimas Martín, ha enviado una reflexión sobre los resultados electorales del pasado 26M, en la que se muestra partidario de dar “una oportunidad” a Dolores Corujo “como la candidata más votada a la presidencia del Cabildo, por un tiempo prudencial, para que demuestre si es merecedora de la confianza que se le otorga. En caso contrario, tiempo hay para la moción de censura. Lo contrario sería un grave error como los cometidos en el pasado, incluido los del que suscribe”, dice.

Hace autocrítica de sus `propios actos políticos, aludiendo ahora a la importancia de respetar la filosofía del ordenamiento jurídico. “El legislador, cuando introdujo la moción de censura, lo hizo pensando en que se pudieran corregir graves problemas de gobernabilidad o hechos que alteraran el buen y normal funcionamiento de las instituciones, pero no para que se censurara a quien no ha tenido oportunidad de demostrar su capacidad o incapacidad”, subraya.

En estos momentos Dimas cumple prisión por el caso de la Casa de Los Rostros en Yaiza y está pendiente de la sentencia del la pieza de las comisiones ilegales en el Ayuntamiento de Arrecife, donde el Ministerio Fiscal pide 17 años de prisión, lo que haría su octava condena firme.

El líder insularista insiste en que “el pueblo soberano ha manifestado su voluntad en las urnas y debemos respetar y acatar su mandato, aunque algunos resultados nos parezcan desconcertantes como la sorpresiva mayoría absoluta del alcalde de Teguise, (Oswaldo Betancort) o el amplio apoyo obtenido por don Pedro San Ginés a la presidencia del Cabildo”.

Sobre San Ginés, dice que “tiene la inexcusable obligación de explicar a los ciudadanos los entresijos que rodearon la adjudicación de un bien tan sensible y determinante para nuestra isla como los activos de Inalsa a Canal Gestión”.

Además, relaciona los proyectos que, a su juicio, el presidente saliente ha sido “incapaz” de impulsar en diez años de mandato, como el eje Arrecife-Playa Blanca, la ampliación de la pista, una terminal de cruceristas, el palacio de congresos, la tan “cacareada” autovía que ha de unir la circunvalación de Arrecife con la carretera de las Playas, el carril bici, el soterramiento de las líneas de alta tensión, “que se inició, bajo mi presidencia, en el año 1991-1992”, o el propio PIOT”, menciona.

Coalición Canaria tampoco sale bien parada del comentario de Dimas Martín sobre la gestión llevada a cabo en Teguise, donde la lista que encabeza Oswaldo Betancort ha revalidado la mayoría absoluta. Para Martín, que fue alcalde de la Villa hasta 1991, el actual regidor “no ha hecho nada que lo haga merecedor de tan abultado respaldo” y cree que “al igual que los que me secundaron en el cargo, se ha dedicado a vivir de la herencia recibida sin ni siquiera aplicarle el adecuado mantenimiento o siquiera terminar algunos de los proyectos que dejé iniciados”, dice.

Cosa distinta es el caso de Arrecife, donde, para Dimas Martín, la actual alcaldesa, la socialista Eva de Anta, “ha quedado desautorizada por su incapacidad para resolver los problemas de la ciudad”, aunque cree que su antecesor Manuel Fajardo (CC) tampoco está exento de responsabilidad y que De Anta “ha sido víctima de sus propios compañeros y especialmente de sus asesores”. En la capital, apoya a la figura del emergente Echedey Eugenio (CC) “en el que la ciudadanía ha puesto sus ilusiones de futuro” y aconseja al PP que adopte, “no necesariamente desde el gobierno municipal”, el papel de mediador.

La misiva enviada por Dimas Martín desde la prisión de Tahíche, lo que denomina “injustificado encierro, sin precedente en España”, acaba refiriéndose al papel de las pequeñas formaciones nacionalistas tras los resultados al Parlamento de Canarias, al albor del cambio en los topes electorales insulares del 30 al 15%.

Martín se muestra contrario a un futuro gobierno de CC y arremete contra las “deslealtades, transfuguismos, traiciones, oportunismos y vividores de la política como Ramón Bermúdez, Manuel Cabrera, Gladys Acuña o Luis Arráez, y tantos otros hijos del PIL”, a su juicio castigados en las urnas por los ciudadanos a los que no augura un futuro en unión y armonía si, finalmente, CC pierde la presidencia de Canarias.