En Arrecife hay, al menos, 458 casas que se construyeron sin licencia y que siguen en esa situación. Están incluidas dentro de un censo que elaboró el Gobierno de Canarias en 1998 con las casas construidas antes de 1996 y que se recoge dentro del documento del nuevo Plan General de Ordenación Urbana, pendiente de aprobación.

La mayoría de estas casas sin licencia se encuentran en los barrios de Maneje, Argana Alta, Argana Baja y San Francisco Javier, aunque también hay casas sin licencia en Altavista e incluso en Titerroy y en los diseminados.

En 1997 el Gobierno de Canarias decidió elaborar un censo en todas las islas con este tipo de edificaciones fuera de ordenación, ante su proliferación y “los efectos de índole socioeconómica que derivarían de aplicar las medidas legales de restablecimiento de la realidad física alterada ilícitamente”, según señala Gesplan, redactor del documento del PGOU de Arrecife.

“La cuestión -dice el documento-se centraba en analizar si el planeamiento urbanístico vigente en los municipios canarios, ponderaba adecuadamente la demanda social existente y previsible de suelo o de vivienda, con la necesaria protección y ordenación del territorio”.

“Se estimaba que planteando como objetivo alcanzar el equilibrio entre ambos intereses al tiempo de la formulación o revisión de los instrumentos de planificación urbanística, podría resolverse parte de la problemática descrita”, según el documento.

Para ello se elaboró un decreto por el que los propietarios tenían cuatro meses para incorporarse a ese censo, que tenía como efecto inmediato la suspensión cautelar de una posible orden de demolición dictada en un expediente de disciplina urbanística.