Los Centros de Arte, Cultura y Turismo del Cabildo de Lanzarote firmaron el pasado 1 de julio con el puerto deportivo Marina Rubicón un contrato de alquiler de dos locales de 120 metros cuadrados cada uno para usarlos como taller de trabajo y exposición del artista Jaison deCaires, el creador del futuro Museo submarino de Lanzarote que se ubicará en las inmediaciones del puerto y se unirá a la Red de Centros de Arte, Cultura y Turismo.

El alquiler de los dos locales, por un periodo de dos años, costará 2.000 euros al mes aunque a esta cantidad hay que añadir otros 576 euros ya que se suman los gastos de mantenimiento que se fijan en 2,4 euros el metro cuadrado.

En el contrato de alquiler se especifica que, en la publicidad que se haga del futuro museo, la Entidad Pública empresarial de los Centros Turísticos, “al referirse a su actividad, habrá de hacer mención a que se encuentra situado en el centro Marina Rubicón de forma que durante la elaboración del museo y mientras el artista tenga en la Marina su taller, se muestre públicamente el vínculo Marina-Artista-Museo Submarino”. Desde Podemos se ha criticado la vinculación familiar del consejero delegado de los Centros, José Juan Lorenzo, con el gerente del puerto, Rafael Lasso, que firman el contrato.

En el contrato se especifica que Centros Turísticos, “al referirse” al taller del artista, “habrá de hacer mención” a que se encuentra en Marina Rubicón

El artista británico Jaison deCaires, que es quien lleva a cabo la realización de las esculturas, las figuras humanas que formarán parte del Museo submarino, cobra según el expediente 6.000 euros al mes durante dos años, y además tiene siete asistentes para hacer su trabajo que cobran entre 800 y 2.000 euros mensuales. En el apartado de salarios aparece, por ejemplo, este gasto de 800 euros mensuales como, “Volunteer house rental”.

El coste del Museo para los Centros Turísticos será de 700.000 euros, De esa cantidad, la mitad irá a pagar los salarios de estas ocho personas durante dos años. El artista, además se llevará el diez por ciento de los beneficios del merchandising y los Centros tendrán que pagar un canon anual a Costas de 11.000 euros. La entrada al Museo submarino costará cinco euros y en la Memoria no aparece ninguna mención a la posibilidad de que los Centros alquilen los equipos de buceo.

“Durante la elaboración del museo” el contrato con el puerto obliga a mostrar “públicamente el vínculo Marina-Artista-Museo Submarino”

El proyecto ha recibido críticas de la oposición en el Cabildo por destinar esa cantidad a crear un nuevo Centro Turístico por dos motivos principalmente: por no usar ese dinero para acondicionar los Centros ya existentes y por hacer el Museo dentro de unas instalaciones privadas. Las embarcaciones para acercar a los buceadores a visitar el Museo saldrán de Marina Rubicón.

En la Memoria del proyecto se afirma que “el fin principal objeto de este proyecto no es la rentabilidad económica del mismo, aunque sí se articularán  los medios necesarios paraque el museo se mantenga económicamente gracias a su explotación comercial”. DeCaires ya ha creado otros dos museos submarinos en el Caribe, uno en la Isla de Granada y otro en Cancún.

El artista Jaison deCaires, autor del Museo Atlántico promovido por los Centros Turísticos, percibirá durante dos años 6.000 euros mensuales

El convenio para poner en marcha el Museo se firmó a finales del año pasado con deCaires. Se iba a firmar en un principio con la Fundación Helge Achenbach, presidida por el consultor de arte alemán del mismo nombre pero finalmente se firmó con el artista británico tras la detención y encarcelamiento de Achenbach en Alemania acusado de una estafa millonaria relacionada con la compra venta de obras de arte.

En la memoria del proyecto, no obstante, se indica que “el mecenazgo de este proyecto en Lanzarote lo ejerce la Fundación Helge Achenbach”. La Fundación ya colaboró con los Centros en varias exposiciones y se iba a hacer cargo de la programación artística en el Convento de Santo Domingo. También se preveía que la Fundación Achenbach cobrase un canon por la apertura del Museo submarino.