El próximo domingo mi papeleta llevará el nombre de Ángel Víctor. Votaré por él porque estoy convencido de que es el secretario general que el PSOE necesita. Y no es porque me hayan convencido sus promesas. Me ha convencido su historia, lo que ya ha demostrado.

Muchas compañeras y muchos compañeros hablan de ese concejal que lideró a un PSOE débil y minoritario en Arucas y lo convirtió en un PSOE ganador, llegando a ser alcalde. Otras y otros hablan de su capacidad para forjar pactos y colocar al PSOE como fuerza de referencia en Gran Canaria.

A todas y a todos les he reconocido esa parte, cierta, de la historia pero les he recordado que a mí hay otra que me parece todavía más importante: con Ángel Víctor Gran Canaria ha vivido una época de extraordinaria fortaleza orgánica. En Gran Canaria el PSOE no es un partido del que se habla por sus problemas internos, en Gran Canaria se habla de las políticas del PSOE (gusten o no gusten), se habla de lo que hace el PSOE, pero no del PSOE.

Eso es lo que necesitamos: un secretario general capaz de liderar el partido con la prudencia y el buen hacer que requiere el trato con la gente (somos eso, gente que comparte ideales y trabaja junta), pero también con la firmeza que requiere gobernar cualquier organización. Ese es el mejor retrato de Ángel Víctor. Por eso suma.

La historia de los otros candidatos también está ahí: conflictos internos, problemas con los socios, decisiones en reuniones casi clandestinas de grupos cerrados de afines, todo lo contrario a lo que representa Ángel Víctor.

Por eso, porque Ángel Víctor suma mientras que otras y otros nos dividen como partido y nos restan capacidad y credibilidad, yo también me sumo a su proyecto, para sumar con Ángel Víctor.

* Militante del PSOE en Arrecife