Días después de su centenario (1914-2014) el reloj de la iglesia de Haría necesitaba un cuidado técnico y de mantenimiento. Por ello, y en el estado en que se encuentra, no se ha puesto a funcionar.  Tal es el reflejo de lo ocurrido el pasado día 4 de agosto de 2019, que fue necesaria la intervención de los bomberos tras la caída de cristales de la esfera de dicho reloj. En aquellos momentos las autoridades municipales hicieron acto de presencia.

Donado por D. Antonio Ramírez del Castillo, allá por el año de 1911, fue colocado e inaugurado en el año 1914 debido a que fue necesario salvar algunos inconvenientes personales y "arquitectónicos" para construir una torre que alojara dicho reloj.

La maquinaria del reloj de la iglesia de Haría, fabricado en Francia por el relojero Paul Odobey (Amorez, Jura), de más de 100 años de antigüedad, presentaba en su centenario,  en todo su conjunto, un buen estado aunque en pésimas condiciones técnicas de mantenimiento.

Con fecha 4, 5 y 6 de septiembre de 2014 se celebró en el Cabildo de Lanzarote el XVII Simposio sobre Centros Históricos y Patrimonio Cultural de Canarias, organizado por el Centro Internacional para la Conservación  (CICOP). En la ponencia Relojes Públicos de Lanzarote, impartida por Luís Ramírez Castro y Daniel Mato Jara, se destacó el extraordinario valor que ostenta el reloj de la iglesia de la Encarnación de Haría, dentro del Patrimonio Industrial de Lanzarote.

Por todo ello, hagamos un llamamiento para que las autoridades locales y eclesiásticas transmitan la necesidad de dirigirse a los altos cargos de la administración, por el bien del interés cultural  de nuestro pueblo, de la isla y del archipiélago.

* Memorialista de Lanzarote