Varios alumnos se quejan

Prácticas de instalaciones solares haciendo de jardineros

Saúl García 2 COMENTARIOS 11/10/2016 - 07:18

Pintar, barrer, limpiar las piscinas y hacer de jardineros de varios complejos de apartamentos. Esas son las prácticas que han ofrecido a algunos alumnos del curso 'Montaje y mantenimiento de instalaciones solares fotovoltaicas', que imparte la academia Centro de formación canario, a través del Servicio canario de empleo, según se han quejado.

El curso, para formación de desempleados, comenzó en el mes de mayo con 13 alumnos. En septiembre, tras más de 400 horas de parte teórica, debían hacer 120 horas de prácticas en empresas que se dediquen a este tipo de instalaciones. Las primeras quejas de algunos alumnos ya surgen en la parte teórica. Uno de los alumnos asegura que en la academia no tenían el material adecuado para impartirse el curso, ya que apenas hay paneles solares y que les entregan “un inversor de juguete y unas baterías como las de petaca de seis voltios”.

Cuando llega la hora de hacer las prácticas en empresas, a cinco de esos alumnos se les destina a dos de las empresas que instalan placas fotovoltaicas, pero al resto los mandan a complejos de apartamentos o incluso a una empresa de fontanería, según aseguran.

Seis de esos alumnos, ante la situación de que tienen que hacer labores que no tienen que ver con el curso que han realizado, acuden a la academia y, como no obtienen una respuesta satisfactoria, deciden acudir a la Oficina del Servicio canario de empleo de Arrecife, donde registran un escrito de queja en el que reflejan que en las empresas donde se les ha asignado para las prácticas no hay instalaciones fotovoltaicas o no hay que instalar ninguna.

Varios alumnos de un curso del Servicio canario de empleo de montaje y mantenimiento de placas solares fotovoltaicas aseguran que los envían a hacer las prácticas a apartamentos para mantenimiento

Los alumnos se ven en la disyuntiva de seguir haciendo las prácticas porque si no terminan el periodo de prácticas  no obtienen el título del curso. Según el escrito que registran, en el momento en que están presentando esa queja se presenta el coordinador del curso en la Oficina del SCE. Los alumnos hablan de “sensación de engaño”, “por lo que ofertaba el curso y lo realizado, falta de material que prometían y nunca llegó”.

Tres semanas después de ese escrito, los alumnos no han recibido ninguna contestación por parte del Servicio canario de empleo. Cinco de ellos, no obstante, se retractan del escrito con posterioridad y finalizan el curso, mientras que otro presenta un nuevo escrito en el que renuncia a sus prácticas porque en el complejo al que le han enviado no hay placas fotovoltaicas y porque sus funciones son las de jardinería, mantenimiento y pintura.

La directora general del Centro de formación canario, Laura Betancort, asegura que no quiere hacer ninguna declaración porque la queja sigue su trámite, mientras que en el Servicio canario de empleo, dependiente de la Consejería de empleo del Gobierno de Canarias, con quien ha contactado este periódico, tampoco han dado ninguna explicación.

Comentarios

Penosa la situación de estos alumnos en paro que quieren estudiar, pero la sociedad ya está cambiando y lucha por su derechos al denunciar. Tenemos que seguir así, luchar por que las cosas mejoren.
Vamos a ver!... El problema es que no hay empresas de prácticas de instalación de placas solares, entonces si no hay empresas de prácticas, ¿Por qué se imparte ese curso en Lanzarote?. ¿Para qué? ¿Para más parados formados? y por ejemplo cursos como animador turísticos o recepcionista nada de nada.