De europea a planetaria; de estar dirigida por el periodista de Radio Nacional Javier Tolentino, a ser coordinada por el cineasta tinerfeño Víctor Moreno y, a partir de 2018, por Javier Fuentes Feo, el brillante director del Cendeac murciano que fue cesado por su librepensamiento... La Muestra de Cine de Lanzarote crece, pero ellos permanecen: se llaman Marco Arrocha y Busky Curbelo, se hicieron cinéfilos en El Almacén y huyen de la notoriedad mediática como de la peste.

“La Muestra de Cine de Lanzarote es un lugar de resistencia que nosotros necesitamos”, dice la directora Valerie Massadian, grabándose con el teléfono móvil desde el baño de un hotel en Berlín, buscando un poco de intimidad. Es la directora de Milla, la película ganadora del certamen internacional de largos que convocó este año la séptima Muestra de Cine de Lanzarote. La misma obra que premió el público del Festival de Locarno este año.

Su agradecimiento se suma al de otros muchos cineastas y periodistas que han visto en esta pequeña y valiente muestra, una oportunidad para exhibir películas que quieren ser libres. Desde sus comienzos, este proyecto cultural sin ánimo de lucro se ha hecho con mucho empecinamiento, pasión y claridad de ideas. En el camino ha habido momentos de caos y acontecimientos muy especiales.

El último ha sido el histórico regreso de Thomas Mauch, fotógrafo de Werner Herzog, a Tegoyo, a la localización donde cincuenta años antes rodaron También los enanos empezaron pequeños. Mauch se perdió en sus pensamientos y paseó por los alrededores de la vieja casona, muy agradecido por el homenaje que le brindó la Muestra.

La de este año ha sido una programación dedicada a los colectivos oprimidos. “Nos ha salido así sin quererlo”, decía Marco Arrocha, programador y pistón fundamental del proyecto. Para los estudiantes Leandro Brito, Santiago López y Sara Farías, Jurado Juvenil de esta séptima edición, la Muestra ha sido “una oportunidad de ver un cine nuevo, distinto a lo que la gente está acostumbrada”. “Lo que vemos aquí no lo podemos ver en ningún otro sitio”, dicen.

De la perturbadora película que Herzog rodó en Lanzarote no sabían nada. La vieron en la proyección inaugural, en el Teatro de Tías y dicen que es una obra “brutal”, “chocante”, que “te rompe todos los esquemas y te abre la mente”. ¿Y el cine que se rueda en Canarias? ¿Les llega? ¿Lo ven? “Somos conscientes de que hay películas que se han rodado aquí en Canarias, pero no tanto del tipo de cine que se produce y se crea en Canarias”, dicen. “Son cosas distintas”.

Jurado juvenil. Foto: Felipe de la Cruz.

Leandro y Santiago son estudiantes de Gráfica Audiovisual y tienen un canal de YouTube donde cuelgan sus producciones. Empezaron grabando en el skatepark de Arrecife, y ahora graban música, gente que monta bmx… todo lo relacionado con el arte urbano. Sara empezará la misma formación el año que viene. Los tres tienen mucha inquietud por experimentar todo tipo de obras audiovisuales. ¿Las mejores películas que han visto antes de la Muestra? Pride, Intocable y Bronson, dicen. El 99 por ciento de su entorno se nutre de contenido audiovisual en plataformas como YouTube.

Marco y Busky tenían pocos años más cuando empezaron a ir al Cine Buñuel. Aquello les cambió la vida. El cine dejó de ser un pasatiempo y se transformó en otra cosa. Así se entiende la emoción que sintieron cuando el cartel de la Muestra ocupó por fin el expositor exterior de El Almacén: “Nada más que por esta foto valen la pena tantos meses de esfuerzo. Tantos años… Aquí nos hicimos cinéfilos”.

El cartel de este año dice mucho del espíritu punk que tiene la Muestra. Samuel Espinosa, su autor, dibujó a boli Bic y sobre una hoja con cuadrícula el eucalipto de Tegoyo donde aparecen varios de los enanos de la película de Herzog. El viejo árbol se conserva intacto. “El cartel tiene la forma de boceto hecho a bolígrafo porque ese es también el cine que preferimos: el que se esboza a tientas antes de tomar la forma de algo”, explicaban los programadores en Facebook.

Equipo completo. Foto: Javier Fuentes.

A Víctor Moreno y Marco Arrocha les acompañan como programadores el cineasta Xurxo Chirro y el futuro director de la octava Muestra de Cine de Lanzarote, Javier Fuentes Feo. La cineasta y filóloga Nayra Sanz como presentadora de las proyecciones escolares y los incombustibles Samuel Espinosa, Chus Cabezas, Loli Curbelo, Miguel Niz y Marta Martín como ayudantes de producción de un proyecto que cada año está mejor arropado por cineastas canarios de la asociación Microclima y periodistas como Samuel Alarcón (El cine que viene, RNE), Carlota Mosegui (Otros Cines) y Jonay Armas (Caimán Cuadernos de Cine).

Desde los primeros preparativos hasta los martirizantes días previos a la inauguración, en los que puede ocurrir casi todo (cancelaciones de vuelos, extravíos de copias en aduanas de Río de Janeiro...), la Muestra se mantiene fiel a su carácter: sigue honesta, reivindicativa y enamorada hasta las trancas de un cine que ejercita el espíritu crítico.