El parlamentario lanzaroteño del grupo nacionalista (CC-PNC-AHÍ) Jesús Machín Tavío pidió este martes a la consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias, Alicia Vanoostende “que establezca el principio de precaución de la Unión Europea que marca que cuando hay una pesca que esquilma y no es sostenible, se deben proteger nuestras aguas de forma inmediata”.

Machín trasladó, así, la preocupación de los pescadores de la flota artesanal de Lanzarote y La Graciosa “que han alertado del peligro del regreso de los buques palangreros desde hace dos meses”, dijo.

“No respetan el talud de las islas (entre las cinco y las diez millas) y se atreven a faenar en aguas someras de Lanzarote y del Archipiélago Chinijo”, subrayó el parlamentario nacionalista que recuerda, además, que ya el Cabildo de Lanzarote “ya aprobó una moción relativa a este tema a iniciativa de Coalición Canaria”.

“Nuestros pescadores han protestado ante la Dirección General de Pesca y no se ha hecho nada, los buques palangreros siguen faenando como les da la gana sin que nada impida esta pesca abusiva, no selectiva y no sostenible”, señaló.

Estos buques pescan en las mismas aguas que los pescadores artesanales de la zona, con la particularidad, de que los palangreros, despliegan decenas de kilómetros de liñas y miles de anzuelos. “Esto produce una situación bastante alarmante, arrasan los fondos, no es una pesca selectiva por lo tanto, esquilman nuestros fondos en jornadas maratonianas”, asegura el diputado.

“Hay que recordar también que los buques palangreros, pescan con buena y mala mar, dejan el 20% de los anzuelos utilizados en el fondo, con lo que eso supone. Sin embargo, los pescadores artesanales pescan en orilla un tiempo prudencial y luego dejan regenerarse esa zona pasando a  faenar en aguas más profundas”, explica.

Asimismo, Jesús Machín ha insistido en que los estragos producidos por el  palangre en los años 90 hicieron muy difícil la recuperación de nuestros fondos. “Si para que los buques palangreros pudieran faenar utilizando 2.500 anzuelos, no hizo falta ningún estudio, sabiendo que esquilma y quema nuestra biodiversidad marina, no entendemos cómo la respuesta a las protestas de nuestros pescadores artesanales es que se necesitan estudios para poder actuar contra ellos. En pesca existe el principio de precaución, ante la duda pueden tomar medidas de protección, no esperar a que sea un desastre contra la biomasa que difícilmente se pueda recuperar en años”, dijo. 

De este modo, Machín ha instado a la responsable canaria de Pesca a dirigirse al Gobierno del Estado para explicarle que los intereses de los canarios y de las flotas pesqueras artesanales no son los mismos que los de los buques palangreros.

“Deberíamos estar protegiendo a nuestros pescadores artesanales. El mar ha tardado décadas en generarse. Hay que actuar de manera certera”, insistió.