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Los médicos de atención primaria se unen para pedir más cambios y recursos

La nueva asociación Amapcan reclama que se elimine el tiempo de la burocracia en la atención al paciente, se estabilicen las plantillas, se multiplique la inversión y se afronte la mejora de la prevención

Mercedes Hernández, Manuel Fuentes y Fernando Jiménez, miempros de Amapcan. Foto: Adriel Perdomo.
Saúl García 4 COMENTARIOS 21/04/2021 - 07:06

Ya tienen representantes en todas las islas. Las últimas en incorporarse han sido La Graciosa y El Hierro. Es una nueva asociación de médicos de atención primaria, que se llama Amapcan, que surge a su vez de la Plataforma de médicos de atención primaria de Canarias, que nació el verano pasado. Son unos 350 integrantes, principalmente médicos de familia y generales, pero también pediatras, médicos de urgencias extrahospitalarias, residentes y docentes.

Dicen que, por primera vez, los médicos de familia se han unido en toda Canarias. Ya tuvieron una reunión con el director del Servicio Canario de Salud y tendrán otra pronto, a la que asistirán con un asesor legal. Su objetivo principal es el de defender, mejorar o poner en valor la atención primaria y su enemigo más temido es la burocracia, a la que se enfrentan ahora estos médicos.

“Defendemos la necesidad de una transformación radical de la Atención Primaria que pasa indiscutiblemente por la mejora de las condiciones laborales del personal médico, al que defendemos y protegemos, conscientes de que constituyen un bien preciado y escaso”, dicen en la asociación.

Los objetivos, resumidos, son estos: “Pretendemos potenciar y dar a conocer las labores que llevamos a cabo en este nivel asisitencial y, para resolver algunos de los problemas que afectan al buen funcionamiento de la Atención Primaria, demandamos mejoras en los medios técnicos y humanos que conllevan un aumento presupuestario adecuado para poder ofertar un servicio de mayor calidad a nuestra población”. En definitiva, su objetivo es el de presionar para mejorar la calidad de vida del paciente.

En Lanzarote, ya hay un grupo que se ha sumado a la nueva asociación. Manuel Fuentes, pediatra en San Bartolomé, es el vicepresidente. En el grupo promotor también se encuentran Mercedes Hernández, médico de familia, y Fernando Jiménez, médico de atención primaria en Teguise. “Los problemas llevan ya muchos años y la atención primaria sigue siendo el patito feo, y a pesar de que es la puerta de entrada para los pacientes es la que menos recibe, está infradotada”, aseguran.

Pero invertir en atención es rentable desde el punto de vista sanitario y social, porque hace una función preventiva y evita que algunas enfermedades avancen; y desde el punto de vista económico, porque el tratamiento de esas enfermedades es más caro, después, en un centro hospitalario. Desde la asociación señalan que si no se invierte lo suficiente no es por razones médicas, sino de gestión. “A quien más le conviene que se invierta en atención primaria es al paciente”, aseguran.

Una de las demandas es que haya mayor coordinación entre la atención primaria y la hospitalaria. Actualmente hay dos programas informáticos que se llaman igual, Drago 1 y 2, pero no están conectados y por tanto, en atención primaria no pueden consultar el historial clínico hospitalario de un paciente, lo que empeora la calidad asistencial porque el médico debe llamar a Atención al paciente si quiere comprobar ese historial.

Lo primero que piden estos profesionales de la medicina es “que se cumpla la legalidad”, que estipula que haya un máximo de 1.200 pacientes por cada médico y que puedan dedicar al menos una media de diez minutos por cada consulta, con un máximo de treinta al día. Ahora, en algunos casos, hay más de 1.500 o 1.600 pacientes, la media diaria no supera los seis o siete minutos, “y la mitad del tiempo es burocracia o papeleo”.

“En invierno yo puedo llegar a ver a sesenta niños en un día y debería ver la mitad”, señala Fuentes. “Queremos transmitir que la atención primaria se debe tomar en serio, dotarse de mayor dignidad y de más recursos y dejar de asumir muchas gestiones administrativas que no le corresponden”, apuntan.

“La primaria es el cajón de sastre donde se acaba atendiendo a todo el mundo”

La pandemia ha traído consigo algunos ajustes que son positivos, como la atención telefónica para renovar recetas o cuestiones que se pueden solventar de una forma rápida. “Pero es que eso se podía haber hecho antes”, dicen.

Los profesionales piden más tiempo para llevar a cabo las funciones de prevención que debería realizar la atención primaria porque, señalan, con el tiempo que tienen ahora, “no se puede insistir en la necesidad de llevar hábitos saludables ni realizar charlas sobre consejos de salud, ni hacer formación... “Y todo eso es para lo que nos formamos”, insisten.

Otro elemento que no ayuda a mejorar la atención es la temporalidad de la plantilla. La última oferta pública de empleo se convocó en 2007 y el examen se hizo siete años después. Los médicos consideran que es muy importante para la población que haya estabilidad, que se reduzca el número de interinos y que el médico tenga su plaza y conozca a los pacientes, que no se dé el caso, como se da ahora, de que una persona tenga tres o cuatro médicos distintos cada año. “La primaria es el cajón de sastre”, señalan. Es donde se acaba atendiendo a todo el mundo: turistas, desplazados, personas sin cita y alguna urgencia.

En Amapcan creen que existe una “falta de enfoque” para no dar importancia a este tipo de atención. En el País Vasco, la atención primaria está mejor dotada, tiene más dinero por paciente, pero es que, dentro de la propia Canarias, una tarjeta sanitaria de Lanzarote está peor dotada económicamente que una de Gran Canaria, por ejemplo, señalan. “Si son 400 euros menos por tarjeta, son 30 millones de euros al año y con ese dinero se pueden mejorar mucho las pruebas para evitar enfermedades crónicas, como obesidad o diabetes, en las que estamos en los puestos de cabeza en España”, destacan.

También insisten en la importancia de la estructura de atención primaria, ahora, para la vacuna de la COVID, tanto para ponerla como para convencer a los indecisos. Por último, piden incorporar a otros profesionales sanitarios como fisioterapeutas, que mejorarían la atención para ciertas dolencias “porque la tardanza puede suponer que el paciente tenga que tomar tres pastillas más”.

Comentarios

Escuchen al personal sanitario. Una sociedad enfermera es una sociedad que no avanza.
El señor Jiménez siempre en todos los saraos , da igual porqué. A ver , en mi entorno familiar han tenido que solicitar cita con el médico en los últimos meses en primaria en 8 ocasiones y ¿ saben cuando les vieron en persona ? , ninguna . Dos veces en urgencias y uno ingreso y no por él dichoso Covid . Lo curioso es que para recoger la baja en el centro dos médicos a la una y media de la tarde ( dicho por la administrativa ) trabajan parece y mucho . Esto lo hemos oído todos . Si que aumenten el personal y no para que en horario laboral les veamos en el híper Dino .
Para Lanzarote es imprescindible que los médicos y enfermeros se queden en la isla y para ello mantener sus trabajos y que sean fijos. Otra cosa es la supuesta sobrecarga de trabajo de la hablan ya que como en todo hay gente que cumple su horario y funciones y otros que no lo hacen mientras hay gente enferma seriamente y no les atienden sencillamente porque no están en su puesto. Y por favor ya es hora de que a los enfermos se nos reciba cara a cara y no todo por teléfono y a veces hasta con prisas .
Pues podrían empezar por realizar las consultas presenciales,¿ no, señor Jiménez?

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