MEDIO AMBIENTE

Los espacios naturales desprotegidos de Lanzarote

La Geria, Los Volcanes, la Cueva de los Naturalistas y el Archipiélago Chinijo carecen de planes de conservación y normas de ordenación pese a su alto valor medioambiental

Saúl García 7 COMENTARIOS 14/03/2022 - 06:31

La parálisis en la planificación y ordenación de los espacios naturales protegidos va por islas. Mientras que en Lanzarote no se ha avanzado en los últimos años, el Cabildo de Fuerteventura acaba de encargar la redacción y la tramitación de 14 documentos de planeamiento territorial a la empresa pública Gesplan por algo más de tres millones de euros.

Entre esos encargos está el Plan Insular, principalmente, pero también la ordenanza de energías alternativas, la norma para fijar los criterios de las acampadas o las modificaciones menores en planes de espacios naturales protegidos en tres parajes naturales: los Monumentos Naturales de la Montaña de Tindaya y Cuchillos de Vigán y el Sitio de Interés Científico de la Playa del Matorral.

Además, se han contratado los Planes de Ordenación de los Recursos Naturales y el Plan Rector de Uso de la Gestión de los Parques Naturales del Islote de Lobos, Jandía, Corralejo y del Parque Rural de Betancuria, y la elaboración de cuatro planes para la gestión de varias Zonas Especiales de Protección de Aves.

¿Y en Lanzarote? ¿Cómo está la ordenación de los espacios naturales? Del Plan Insular no se sabe gran cosa. Se encargó en 2007 y nunca se pasó de la fase de avance. Hasta 2017, el Plan Insular servía como Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) para los espacios naturales, pero ahora necesitan uno propio.

La última novedad por parte del Cabildo es que acaba de delegar las competencias para la evaluación ambiental de proyectos y de todos los instrumentos de ordenación insular en el Gobierno de Canarias. Es el único de los cabildos que ha hecho directamente esto y no ha tratado al menos de crear su propio órgano ambiental.

La presidenta del Cabildo, Dolores Corujo, reconocía que persisten en el Cabildo “la carencia de los recursos personales y materiales con que dotar el órgano ambiental insular”, consideraba “muy complicado” que este órgano se conformase “en esta Isla” y señalaba que la tramitación del Plan Insular es absolutamente prioritaria, pero también lo es elaborar planes especiales de los paisajes protegidos, los planes rectores de uso y gestión o las ordenanzas insulares. Esta evaluación ambiental es imprescindible, pero se puede tramitar de forma paralela a los propios planes.

El Cabildo de Lanzarote, actualmente, solo tramita el PORN del Parque Natural del Archipiélago Chinijo, que en realidad elabora el Gobierno de Canarias, pero no ha encargado ni el propio PRUG ni otras normas que hacen falta.

Un PORN incluye la descripción y evaluación detalladas de los recursos naturales de los espacios naturales, su estado de conservación y su previsible evolución. Según la nueva Ley del Suelo, la competencia para aprobar los planes de ordenación, rectores o normas de conservación de los espacios naturales es de los cabildos.

En Lanzarote hay 12 espacios naturales que forman parte de la Red Canaria. De ellos, ocho tienen planes rectores aprobados o normas de conservación. Entre ellos está el Parque Nacional de Timanfaya, que incluye a su vez otros dos espacios: el Islote de Halcones y las Montañas del Fuego, cuyos instrumentos de gestión son de 2005.

El Monumento Natural de La Corona, el Paisaje protegido de Tenegüime, el Monumento Natural de Los Ajaches y los sitios de interés científico de Janubio y de Los Jameos también tienen planes de gestión aprobados, aunque ninguno recientemente.

La causa de que dos de los espacios naturales que no tengan planeamiento es que los tribunales los anularon, y son dos de los más amenazados: La Geria y el Archipiélago Chinijo. La Cueva de los Naturalistas no tiene plan ni normas y el plan del Parque Natural de Los Volcanes se aprobó de forma inicial en 2009, pero nunca se culminó el proceso para su aprobación definitiva.

De los 12 espacios naturales de la Isla, cuatro siguen sin normas ni planificación

En su trabajo de fin de máster titulado Situación de la Red de Espacios Naturales Protegidos de Lanzarote, Reserva de la Biosfera, Famara Guadalupe señala que “después de más de 20 años desde la declaración de la red de espacios naturales protegidos de Lanzarote, todavía hoy hay tres áreas protegidas que no cuentan con un plan de gestión aprobado. Quizá la más significativa sea el Parque Natural de Los Volcanes”.

El trabajo es de hace dos años, pero la situación no ha variado. Destaca que la carencia de los instrumentos de gestión y su falta de actualización hace que no se pueda conocer si se han alcanzado los objetivos de conservación con que los espacios protegidos fueron creados.

Dentro de la Red Natura 2000 también hay seis zonas de especial conservación, que en muchos casos coinciden con otros espacios protegidos: Chinijo, La Corona, Los Jameos, Sebadales de Guacimeta, Cagafrecho y Timanfaya. Todas tienen planes de gestión aprobados en 2016. Y, además, hay ocho zonas de especial protección de aves: Los Ajaches, La Bocayna, Salinas de Janubio, Llanos de la Mareta y Cantil del Rubicón, Timanfaya, La Geria, Llanos de La Corona y Tegala Grande y los Islotes del Norte y Famara. No consta en la documentación del Gobierno de Canarias que ninguna de ellas cuente con planes de gestión.


Campos de lava arrasados en Los Volcanes.

“Mal estado”

En ese estudio, Famara Guadalupe expone que solo el 62 por ciento de los espacios naturales protegidos cuenta con el correspondiente instrumento de gestión aprobado de forma definitiva por el Gobierno de Canarias. Pero, si se aumenta el detalle, no se ha hecho ninguna modificación desde el año 2006.

Esto tiene una consecuencia: que hay actividades nuevas que no están sometidas a una regulación, como por ejemplo los drones o el vuelo de los parapentes, que en varias áreas protegidas se prohíbe el sobrevuelo a una altitud inferior a 300 metros, pero los parapentistas vuelan por debajo de esa altura y pueden provocar daños a la avifauna.

“La actualización de los instrumentos de gestión es muy importante para poder dar una respuesta a las presiones actuales, ya que estas están sometidas a una gran velocidad de cambio”, señala este estudio. Una de las conclusiones del trabajo es “el mal estado en el que se encuentra la red de espacios naturales protegidos de la Reserva de la Biosfera de Lanzarote”.

El aumento de visitantes “puede poner en peligro” la conservación de los espacios

“La transformación que han experimentado los espacios protegidos desde su declaración hace que su calidad y estado haya ido decayendo con el paso del tiempo. No obstante, no cabe la menor duda de que Lanzarote debe invertir en paisaje, medio natural y calidad ambiental.

El mantenimiento y la gestión de estos componentes territoriales deben considerarse tan necesarios y estratégicos como los de otras infraestructuras básicas, pues son los recursos que determinan el potencial económico y la calidad de vida de la población y sus oportunidades de futuro”, señala Guadalupe.

La autora propone como alternativa la Custodia del Territorio como una nueva fórmula de colaboración público-privada capaz de gestionar el territorio de forma eficiente y mejorar la conservación del paisaje insular.

“Es incuestionable que Lanzarote como Reserva de la Biosfera puede llevar la red de espacios naturales protegidos a la vanguardia, e incorporar en el futuro de la ordenación territorial las herramientas suficientes para integrar las áreas protegidas en las demás políticas sectoriales, además de realizar medidas de mitigación del cambio climático en la planificación. Es decir, ser ejemplo, como un día se hizo de entender la ordenación del territorio de manera integral”, resalta Guadalupe.

Presión turística

También se apunta otra serie de problemas por la falta de regulación. En cuanto al uso turístico o recreativo, ocho de estos espacios presentan alguna actuación puntual para su regulación. Entre ellos, el Parque Natural de Los Volcanes, donde, al no contarse con instrumento de gestión, se han hecho algunas actuaciones para la conservación del espacio, como la adecuación de senderos, la incorporación de paneles interpretativos o el cierre de pistas para los vehículos a motor. Timanfaya es el único que tiene un programa de educación ambiental específico, aunque no está actualizado.

“Estas actuaciones puntuales se dan en las áreas protegidas que están gestionadas por los Centros de Arte, Cultura y Turismo, habiendo otros espacios protegidos, como el barranco de Tenegüime, que no tienen ningún tipo de regulación y que quedan totalmente desprotegidos. En líneas generales, al no haber ninguna medida para el uso público, hay actividades que están generando mucha presión en los espacios protegidos”, afirma Famara Guadalupe.


Residuos en Caleta del Trillo, Alegranza. Alexis Rivera/WWF.

“No cabe la menor duda de que Lanzarote debe invertir en paisaje”

El aumento del número de visitantes o de personas que acuden a eventos que se hacen en estos espacios, como pruebas deportivas, bodas, reportajes fotográficos, filmaciones o conciertos “puede poner en peligro” la conservación de los espacios naturales protegidos.

Por eso se reclama un indicador sobre el número de visitantes que pueden asumir, para poder demostrar qué espacios están sometidos a una mayor presión a causa de actividades deportivas y de ocio. Hay seis áreas protegidas que concentran toda esta presión y coinciden con los espacios protegidos que tienen compatibilidad con el uso público.

Todos los permisos para esas actividades llevan a que prácticamente un trabajador de Medio Ambiente del Cabildo tenga que dedicarse en exclusiva a tramitarlos y, por tanto, no se dedique a gestionar los espacios de forma eficaz.

“Otro hecho relevante es que no hay una tasa específica para la realización de estas actividades, salvo las que contienen reportajes y filmación, pero para las restantes no se contempla. Por ello, esto podría ser una fuente de financiación para las áreas protegidas, siempre y cuando estén sometidas a una ordenación y regulación”, concluye el estudio.

Comentarios

Pueblo chabacano , políticos ruines , isla destruida ..
Una cosa es segura: esto nos lo impondrán los conservacionistas. No lo votará la gente. Se nos prohibirán costumbres y tradiciones con las que conectábamos profundamente con la naturaleza para crear, una vez más, un parque de atracciones donde la naturaleza solo se puede experimentar superficialmente sobre raíles y alienados de ella. Quieren alejarnos de la naturaleza. Y todo para que unas cadenas hoteleras saquen más dinero de la isla. Hay un presupuesto de impactos medioambientales y se lo gastan todo en el turismo en vez de limitar el número de turistas y dejar que conectemos con la naturaleza como hemos hecho siempre con acampadas en la playa y demás costumbres que nos han quitado y nos quieren quitar a base de neocolonianismo ecológico del que ni siquiera son conscientes. No les importan las personas, pero deciden qué podemos y no podemos hacer en nuestra isla. Estoy harto de tanta prohibición y que se me diga que soy un cáncer en mi hábitat.
Triste realidad: reserva de la biosfera solo de cara a la galería!
Es todo un síntoma que todo un artículo de fondo sobre un problema sangrante se tenga que sustentar únicamente sobre el testimonio de ¡una estudiante! En cuanto la preocupada y talentosa Famara entre en el sistema, su voz se verá callada. Como la de cualquier especialista que trabaje en el Cabildo. ¡Como la de la propia Fundacion Cesar Manrique! En silencio frente a un Cabildo mediocre e irresponsable, simplemente porque son amigos suyos, después de toda esa turra que nos meten en cuento tienen ocasión sobre el criterio propio, los principios y otras monsergas.
He viajado a muchos lugares del mundo donde no hay prohibiciones. Todos en el tercer mundo, por supuesto. El resultado es devastador. Los seres humanos nos hemos convertido en el único entorno , lo hemos invadido TODO , si no nos sometemos a unas normas nos fumaremos el planeta entero en los próximos años. Lanzarote es una isla masificada hasta extremos que nunca debimos permitir. Los pocos espacios vacíos que nos permiten " conectar " con la naturaleza debemos protegerlos y eso solo se logra si todos obedecemos unas normas .
Aunque parezca extraño, estoy totalmente de acuerdo con todos los comentarios. Y creo que para mejorar de nuestra relación con el medio y disminuir nuestra dependencia turística Lanzarote tiene que empezar por invertir en un sector primario sostenible, agricultura y ganadería ecológica, y extender las pesquerías artesanales de anzuelo que se practican en la reserva marina para toda la isla. Diversificación de la economía y menor dependencia del petróleo (además de producir nuestra agua con energía eólica, etc.), si no lo hacemos tendremos que emigrar.
Date una vuelta por los países escandinavos, sobretodo Noruega. Mira, por ejemplo, sus leyes de acampada.

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