PATRIMONIO

Iniciativa para que el Cabildo asuma la reforma de la casa modernista de La Caleta

CC insta a financiar la obra “de manera directa” ya que el proyecto de la Diócesis fue informado desfavorablemente

Reciente concentración de los vecinos de La Caleta, exigiendo su rehabilitación.
Diario de Lanzarote 2 COMENTARIOS 11/09/2019 - 08:32

El grupo político nacionalista (CC-PNC-SB) ha elevado una moción al pleno del Cabildo de Lanzarote y La Graciosa para que la institución se haga cargo “de manera directa” de la financiación y ejecución subsidiaria del proyecto de reforma de la casa de Luis Ramírez de La Caleta de Famara, un edificio de estilo modernista y de gran valor arquitectónico que en la actualidad se encuentra en avanzado estado de deterioro

El grupo lamenta que “a pesar de que el Cabildo cuenta con una partida económica de 100.000 euros para la adecuación y reforma de la casa del filántropo Luis Ramírez, un emblema del pueblo pesquero de La Caleta, sigamos asistiendo con vergüenza a su derrumbe debido a que el proyecto de reforma que presentó la Diócesis de Canarias, propietaria del inmueble, no se ajustaba a los criterios del Área de Patrimonio del Cabildo y resultaba inaceptable a ojos de los técnicos de la Corporación”, señala, en referencia al informe desfavorable que se justificaba en que el proyecto de restauración propuesto era “demasiado agresivo en el interior”.

Señala, asimismo, al convenio marco firmado en el anterior mandato con la Diócesis “para la protección, conservación y restauración de bienes de interés cultural o catalogados de titularidad eclesiástica en Lanzarote,” en el que se incluía la Casa Ramírez.

En concreto, se establecía que la Diócesis se haría cargo de la redacción de los proyectos de restauración y conservación y de la dirección y ejecución de las obras, mientras que el Cabildo colaboraría con una subvención nominada destinada a la restauración y conservación de estos bienes patrimoniales y arquitectónicos.

Sin embargo, “ante los problemas surgidos, el Grupo Nacionalista solicita la ejecución directa del proyecto de reforma por parte del Cabildo y ha elevado la correspondiente moción al respecto, para que se debata en el próximo pleno.

Indignación en el pueblo

Como publicó Diario de Lanzarote, el pasado 24 de agosto decenas de vecinos de La Caleta de Famara se concentraron para exigir a las autoridades que se intervenga de forma urgente en la citada casa modernista, al grito de “¡Reforma ya!”.

La asociación de vecinos pidió a las autoridades “responsabilidad” ante la situación del inmueble y que se intervenga cuanto antes. “Nos preocupa su estado de abandono y el peligro para los viandantes, por no hablar lo que supondría la pérdida para el patrimonio de Lanzarote que se consumase su desaparición”, indicó un portavoz del colectivo.

En la concentración se leyó un manifesto en el que se recordó que Luis Ramírez (El Islote, 1884-Barcelona, 1950), manifestó que su intención era “hermosear” el pueblo de pescadores que era entonces la Caleta de Famara.

En su testamento, fechado en mayo de 1935, Luis Ramírez legaba su “hotelito” a “perpetuidad” a la parroquia de La Villa con el fin de que lo habitasen los coadjutores y, en su defecto, el párroco y ordenaba en su testamento que el peculiar inmueble fuese conservado “en buen estado”, ya que había “puesto todo o más de lo que era dable para dotarlo”. “Y si por algún concepto o abandono de su dueño dicho hotel tendiese a derruirse, pasará íntegro y con cuanto lo que le es anejo y perteneciente al Hospital de Dolores de Arrecife, para que haga él lo que crea conveniente”, se añadía.

Los vecinos recalcaron que corresponde a la Diócesis de Canarias “conservar el inmueble” y que se debe “proteger esta reliquia del patrimonio de Lanzarote”. Criticaron que el edificio, que está vallado por los desprendimientos en su fachada, se “muera” sin que las instituciones públicas tomen una decisión urgente. Incluso se aludió a la doble insularidad como causa del abandono de la única muestra miodernista con la que cuenta la Isla.

 

Comentarios

Quien tiene que asumir la reforma es el propietario, en este caso, el obispado, que tiene mucha cara, la ley les obliga a ellos a tener sus propiedades en perfecto estado.
Si no tienen dinero para la reforma, que la vendan, como cualquier hijo de vecino. Esos 100.000€ deben ser para sacar a nuestros hijos de los barracones y que estudien en condiciones.

Añadir nuevo comentario