La Dirección General de Industria del Gobierno de Canarias ha denegado una de las dos autorizaciones que se están tramitando para explotar un terreno como cantera en El Jable. Se trata del denominado como Cantera Blanca, en Las Melianas, en el término municipal de Teguise.

La solicitud, de octubre de 2019, es de la empresa Hormigones y Construcciones Arrecife (Hormiconsa), que había comprado un terreno de 18.340 metros cuadrados en la zona conocida como Los Paredones y que había alcanzado un acuerdo de cesión con Lanzagrava, que había iniciado los trámites en 2017.

La empresa pedía que se le autorizara el aprovechamiento del jable como recurso minero y presentó tanto el proyecto de explotación como el estudio de impacto ambiental y el plan de restauración de las áreas afectadas.

El estudio de impacto ambiental se sometió a exposición pública y se evacuaron nueve informes, tanto del Cabildo como del Gobierno de Canarias. Además, Ecologistas en Acción y Seo Birdlife alegaron en contra de la autorización.

Según señala el expediente, no emitieron informes ni el Ayuntamiento de Teguise ni varias consejerías del Cabildo: la de Ordenación del Territorio y Política Territorial; la de Residuos; y lo servicios de Reserva de la Biosfera, Cambio Climático y Geoparque Lanzarote.

El Cabildo sí emitió un informe de carreteras, señalando que la actividad no afectaba negativamente, al igual que Patrimonio, porque tampoco afectaba a ningún Bien de Interés Cultural. El Servicio de Medio Ambiente tampoco informó de forma negativa.

El informe de la Dirección General de Lucha contra el Cambio Climático y Medio Ambiente del Gobierno de Canarias sí advertía de impactos negativos. Así, destaca que el área se localiza a menos de 400 metros del hábitat de la hubara canaria y junto al ámbito de distribución de la especie Androcymbium psammophilum, conocida como cebollín estrellado del jable, incluida en el Catálogo de Especies Amenazadas de Canarias del año 2001.

“El área afecta íntegramente a la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) denominada Islotes del Norte de Lanzarote y Famara  y podrían verse afectadas por las actividades de las canteras en la zona, tales como hubara canaria o el alcaraván”, subraya el informe.

La Dirección General de Lucha contra el Cambio Climático y Medio Ambiente solicita “que los proyectos se enmarquen en una planificación previa, especialmente a nivel insular, con el fin de poder analizar de forma global las sinergias derivadas del conjunto de proyectos y no de proyectos individuales”.

“Dicha planificación debe contar no solo con la cuantificación de instalaciones previstas, sino también con la ubicación de las mismas, dando preferencia a ambientes antropizados frente a ambientes naturales”, añade.

Parcela donde se ha denegado el permiso, junto a Muñique.

Motivos de la denegación

El motivo por el que se deniega la autorización es porque la empresa ya había iniciado los trabajos sin haberla obtenido. La Dirección General de Lucha contra el Cambio Climático había observado que en la parcela se inició la actividad extractiva “y ha sido invadida en su límite sureste por una explotación existente de jable en una parcela contigua, hecho que fue comprobado en visita de campo efectuada el día 17 de noviembre de 2020”, según la resolución.

Por este motivo, pide un informe que indique si existe alguna relación entre ambas explotaciones: la ya existente y la nueva, es decir “si se trata de un mismo promotor para ambas actividades extractivas, si se trata de una ampliación de la explotación situada al este, etc., así como cualquier otra información que ayude a una mejor resolución del expediente”.

La contestación de la empresa es que el proyecto “es una solicitud nueva, no siendo ampliación de una explotación existente”, y añade que “como quiera que se desconocían las reservas de jable existentes se llevó al lugar una pala mecánica para realizar labores de investigación y poder estimar las reservas de materia prima existentes. Por ello se encuentra una zona de la misma afectada por labores de investigación del yacimiento”.

La Dirección General acordó, por tanto, cerrar el expediente. Señala que la Ley de Evaluación Ambiental establece que “no se realizará” la evaluación de los proyectos  “que se encuentren parcial o totalmente ejecutados” sin haberse sometido previamente al propio procedimiento de evaluación de impacto ambiental.

Por tanto, en la resolución a la que ha tenido acceso Diario de Lanzarote, destaca que “procede resolver la finalización del procedimiento de evaluación de impacto ambiental ordinaria”, por tratarse de un proyecto o actividad “ya iniciado, ejecutado o en ejecución”.

Dado que la Declaración de Impacto Ambiental es un informe preceptivo y determinante del órgano ambiental con el que finaliza la evaluación de impacto ambiental ordinaria, sin esa citada declaración cualquier autorización carecerá de validez.

Por lo tanto, en este caso se ha finalizado el procedimiento de evaluación de impacto ambiental ordinaria, se ha archivado el expediente y se ha cancela la inscripción del Libro-Registro de Canteras de Las Palmas.

Uno en trámite

En la zona de El Jable tan solo queda una autorización en vigor para extraer arena. Es la única zona minera que hay en la Isla para este tipo de material y es la única cantera en vigor. Se trata de una concesión a la empresa Indelasa en la zona conocida como Hoya de Medina, autorizada hasta el año 2025.

Quedaban dos permisos en tramitación, éste que se acaba de archivar y otro que se inició en  noviembre del año pasado, en Los Piquillos, promovido por la entidad Dobegui Arrecife.