El diputado del grupo nacionalista canario por Lanzarote y La Graciosa, Oswaldo Betancort, ha planteado este miércoles al consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias varias cuestiones sobre las consecuencias que sufren los usuarios, pacientes y personal del Hospital José Molina Orosa a causa de "unas infraestructuras y servicios deficientes que no están a la altura de la tercera isla más poblada de Canarias y tercera isla en aportar euros a esta comunidad autónoma".

Oswaldo Betancort comenzó su intervención poniendo en entredicho "la escasa planificación, o mejor dicho, la improvisación excusada en una situación de emergencia, a través de la cual concedieron un proyecto de ampliación, que no solo no arregla la asistencia sanitaria de Lanzarote, sino que empeora el día a día para todos los que acuden al único hospital general de la isla".

En primer lugar, Betancort denunció que "los trabajadores tienen que ir una hora antes para poder aparcar y los pacientes ni le cuento, sencillamente, porque el recinto del hospital no cuenta con plazas de aparcamiento suficientes ni para el propio personal. Además, junto a Consultas Externas contamos con un solar de tierra donde aparcan los usuarios, que está al lado del colegio de Argana, con la consiguiente pelotera que se arma cuando se juntan los padres que vienen a dejar o recoger a sus hijos al centro escolar".

"Por otro lado, le cuento algo que quizá desconoce; si usted se va a realizar cualquier prueba y se sienta en la sala de espera, a los pocos minutos de estar allí ya no se sabe si estás en el hospital, en un recinto ferial o en el aeropuerto, porque se empieza a escuchar por megafonía: el conductor del vehículo marca x de color x y matrícula x, que por favor lo retire, así conté hasta 40, me fui y seguía sonando la megafonía con el mismo mensaje. ¿Dónde quedó el silencio tan necesario en un hospital?".

"Yo lo que quiero trasladarle con absoluto convencimiento es que no se pueden hacer las cosas de forma improvisada, dilapidando 16 millones de euros en una obra que ya nace hipotecada por una parcela a todas luces insuficiente para cubrir la asistencia sanitaria de cara a la demanda en Lanzarote", añadió Betancort en referencia al edificio "absolutamente asfixiado que está abocado al caos y que, una vez más, ha demostrado que no programan de cara al futuro, solo improvisan, parchean, porque disparar con pólvora ajena es muy fácil".

Por último, Betancort mostró su preocupación sobre la urgente e inmediata recuperación de la actividad asistencial, "para lo cual hay que dotar a los profesionales de terminales nuevos compatibles con el programa informático instalado, que provoca retrasos de hasta 30 minutos entre paciente y paciente en las consultas del hospital, además de aumentar la plantilla de médicos y demás personal sanitario para aliviar las listas de espera", explicó.