El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Teguise, Marcos Bergaz, ha reprochado al alcalde, Oswaldo Betancort, la "inexplicable opacidad" con la que pretende modificar el Plan General de Ordenación del municipio.

Bergaz se ha referido al intento de legalización de la edificación iniciada por la mercantil Grupo Hoteles Playa, S. A., en la parcela 216 de Costa Teguise cuya licencia fue anulada por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias en el año 2005.

Para el socialista, resulta "inaceptable" que el alcalde haya ocultado las negociaciones que estaba llevando con la promotora a pesar de los repetidos intentos del Partido Socialista para que diera cuenta del cumplimiento de las sentencias de nulidad que afectan a la principal zona turística del municipio.

"Le hemos preguntado a Oswaldo Betancort en repetidas ocasiones sobre la regularización de los esqueletos y siempre hemos recibido un sospechoso silencio por respuesta", ha recordado Bergaz.

"Mientras negociaba con la promotora, Oswaldo Betancort ignoraba las preguntas de la oposición y los requerimientos de los Tribunales hasta que le han amenazado con sanciones económicas", ha explicado.

Según Bergaz: “La opacidad y falta de liderazgo del gobierno de Oswaldo Betancort empieza a ser patológica”.

"Durante años, los esqueletos han constituido uno de los principales problemas de nuestro pulmón económico y Oswaldo Betancort ha mirado para otro lado, con ocurrencias peregrinas como pretender decorarlos, se ha limitado a esperar a que sean los mismos que han ocasionado el problema los que vengan a proponer nuevas ocurrencias como esta de realizar un auténtico 'traje a medida' para legalizar lo ilegalizable", señala.

El socialista ha advertido que la jurisprudencia ha dejado bien claro la absoluta imposibilidad de realizar modificaciones en el planeamiento que tengan por objeto dar cobertura jurídica a edificaciones ilegales: "La modificación propuesta por la empresa promotora que defiende Oswaldo Betancort no responde al interés general y se limita tan solo a adaptar el planeamiento a las infracciones cometidas por la propiedad, tratándose de un caso sangrante del conocido como 'urbanismo de promotor' en el que las pretensiones del promotor se imponen sobre el planeamiento".

"Le pido a Oswaldo Betancort diligencia, y abandonar su opacidad para resolver uno de los principales retos para Costa Teguise”, añade.

"Como principal partido de la oposición tenemos claro que, cualquier intento por salvar del derribo los esqueletos urbanísticos exige máxima transparencia y compensar al interés general por el daño ocasionado a la imagen del municipio y la legalidad durante más de una década, a lo que instamos al alcalde, pues los incumplimientos no pueden salir ni gratis, ni hacerse por la puerta de atrás".