ENTREVISTA

“La ecotasa se va a aplicar porque la UE tiene que reducir las emisiones”

Luis Alvarado, asesor climático en el Foro Económico Mundial

Saúl García 5 COMENTARIOS 17/11/2022 - 07:09

Luis Alvarado participó en la presentación del nuevo plenario de la Cámara de Comercio de Lanzarote y La Graciosa, de la que es asesor externo en materia de turismo. Luis Alvarado es un joven lanzaroteño con una extensa trayectoria. Ha sido asesor climático en el Foro Económico Mundial y para el Gobierno de Reino Unido. Presidió el European Youth Forum y ha trabajado con la Fundación Rockefeller en su programa de ciudades resilientes.

-Ha hablado en su ponencia de los retos de Lanzarote para 2030. ¿Cuál es el principal?

-Hay muchos retos, pero principalmente lo que nos tiene paralizados es la falta de diálogo entre sectores. Hace falta más entendimiento entre lo privado y lo público. Ningún gobierno del mundo va a ser capaz de resolverlos por sí solos y ninguna empresa tampoco. Hay falta de acuerdo público-privado, falta de diálogo y falta de un Plan Isla. Es de primero de inversión. Lo primero que te va a pedir alguien que quiere invertir es cuál es tu plan. Da igual si es inversión pública o inversión privada. Somos un territorio demasiado pequeño como para estar en desacuerdo. Nos hace falta un plan, una visión de hacia dónde queremos ir. Y luego ver los proyectos, infraestructuras o financiación que necesitamos para llegar a ese punto. Y un plan que sobreviva a los cambios políticos. El cambio climático, claro que es muy importante y estamos en una encrucijada de si seguir en un modelo de masificación turística o posicionarnos como un destino premium, o como se quiera llamar, y eso pasa por empezar a elegir mejores clientes.

-Pero ese posible cambio en el turismo, si se produce, va a ser traumático...

-No tiene por qué serlo. Depende de cómo se haga la estrategia. Estos cambios llevan tiempo y no se puede cambiar de la noche a la mañana. Baleares es un ejemplo. Está intentado salir ahora del turismo de masas. Hay zonas de Mallorca que son de absoluto top lujo y eso lo ha hecho sin soltar del todo el turismo de masas. Es una transición que se tiene que planear muy bien.

-Y ha propuesto medidas que en Canarias se acaban de descartar, como una ecotasa o una Moratoria. Dice el Gobierno que no es el momento.

-Da igual lo que digamos de la ecotasa. Se va a aplicar. La Unión Europea tiene que reducir sus emisiones de forma drástica. No es una buena estrategia pedir estar exentos de la ecotasa sin hacer nada a cambio. Es una estrategia más inteligente decirle a la UE: no nos apliquen la ecotasa a cambio de, por ejemplo, convertirnos en un proyecto piloto de combustible verde para aviación. Hay que dar algo a cambio.

-Pues las señales son las contrarias. Hace unos meses se vendió como un éxito que Canarias quedaba exenta de la tasa verde al combustible. No queremos asumir ninguna de las medidas que tenemos que aceptar.

-Se acabó el pedir sin dar nada a cambio. Canarias tiene que cambiar la dinámica con Madrid, Bruselas y el resto. Se nos da muy bien el turismo, hacer carreteras o crear infraestructuras. Lo que se nos da peor es pensar a largo plazo, crear estrategias y pensar de forma innovadora. ¿Cuál es el rol de Canarias en el mundo que viene o que ya está aquí? ¿Queremos un mundo que se nos imponga o queremos adelantarnos, proponer algo innovador para después pedir algo ajustado a nuestra medida? Esas tasas vienen, las emisiones se tienen que reducir y las economías se tienen que transformar.

“Hace falta más entendimiento entre los proyectos privados y públicos”

-Tenemos 14 millones de turistas al año y el mayor índice de pobreza severa de España. ¿Ya podemos decir que este es un sistema fallido?

-Totalmente. Y creo que es un sistema fallido que nos ha acomodado. Ha servido durante un periodo de tiempo, pero ahora no puede ser. El equivalente a 15 millones de turistas en el PIB de Canarias es el mismo que si traemos a 155.000 turistas de alto nivel o nómadas digitales. Teniendo esa alternativa, ¿por qué elegimos el de masificación, que destruye nuestro ecosistema natural, nos lleva a sueldos precarios y a pobreza? Hay otro modelo. No cambiemos de la noche a la mañana, pero empecemos a explorarlo.

-Pero, ¿estamos preparados en cuanto a formación o educación para añadir otros sectores que no sean solo el turismo?

-Me hace gracia, porque trabajo en una institución donde vemos todo en perspectiva o con ojo de halcón y cuando ves a territorios africanos o en el sudeste asiático haciendo esto con menos recursos, menor sistema de bienestar o infraestructuras que Canarias... ¿y no somos capaces de hacerlo nosotros? Claro que hay que invertir, pero esos otros destinos están robando ya ese tipo de clientes. Canarias es un lugar privilegiado. No desconectemos del contexto global en el que estamos.

-¿De dónde vendrán las mayores resistencias, de las instituciones públicas o de los intereses empresariales?

-De ambos. Este evento ha sido un claro ejemplo de que está empezando a cambiar. Hay una nueva generación de empresarios que entiende este reto, que quiere cambiar. Es un reto que haya intereses empresariales de otra época, pero también es un reto muy importante una administración paralizada donde un proyecto tarda diez años en salir. Hay financiación que se queda estancada porque el expediente no sale de la Administración. Hace falta una administración más flexible, ágil, digitalizada, capaz de sacar proyectos rápido, pero también empoderar a empresarios que ya ven esto y darles herramientas para que convenzan a sus compañeros. También está la sociedad civil. Se nos da muy bien tumbar proyectos, pero construir, no tanto. Y la Universidad: que cree conocimiento, pero estar vinculada a la realidad. Un alineamiento de todos los sectores.

-¿Y es posible hacerlo dentro de este sistema capitalista dónde el crecimiento es sagrado?

-Creo que sí. El sistema está cambiado. El sistema académico, la sociedad civil y el sistema capitalista están hablando de lo mismo de forma distinta. Blackrock, el mayor fondo de inversión, está empezando a hablar de límites planetarios, de obligar a clientes a que se comprometan con cero emisiones o los va a dejar ir. Entonces, no es perfecto y la velocidad no es la adecuada, pero el mercado está empezando a ver que puede haber otro tipo de crecimiento, invirtiendo en lo verde y no solo en la tecnología, sino en la naturaleza como un bien. Las empresas están empezando a mapear a los sistemas naturales como un bien, igual que una casa y que da un rendimiento, aunque sea aire limpio o sol. Ahora estamos empezando a ver un cambio. Falta aplicarlo en lo local y rendición de cuentas, que se obligue a las empresas a pensar en el impacto que están teniendo en lo natural, que pueden crecer de forma circular, de forma distinta al crecimiento infinito... Hay formas de seguir creciendo enfocadas en las necesidades de la población local. No hay un modelo perfecto, hay suficientes puntos de entendimiento en medio, pero se ha ignorado a la comunidad científica durante demasiado tiempo, y ahora va a haber un proceso retroactivo para ver desde cuándo sabemos que lo estábamos haciendo mal.

-Estamos rebajando las expectativas de emisiones. Las de la Cumbre del Clima de Glasgow eran bajas, pero ya las estamos disminuyendo de nuevo porque no se van a cumplir.

-Google y Microsoft se comprometieron a hacer cero emisiones en 2030, pero ahora se han comprometido a tener cero emisiones desde el momento en que se fundaron. Son tendencias que vamos a tener que ver en las petroleras o en las energéticas y las eléctricas, y va a ser un proceso similar al de las tabaqueras.

-¿Cree que es posible la sustitución de energías fósiles por energías verdes sin reducir el consumo? Ya se sabe que no hay materiales suficientes para una transición verde.

-Creo que hasta el ochenta o noventa por ciento va a ser posible esa transición, pero en ese otro porcentaje vamos a tener que ser innovadores en materiales diferentes, diseños distintos y estrategias de transporte y volver a muchas de los planes antiguos. Es posible esa transición casi al cien por cien pero tendremos que revisitar la nuclear o la geotérmica.

“Se acabó el pedir sin dar nada a cambio. Canarias tiene que cambiar la dinámica”

-¿En qué consiste el proyecto de convertir Canarias en un ‘hub’ mundial de energía verde?

-Toda esa tecnología verde ya existe. Existe el acero verde, el cemento verde o el combustible verde para los aviones. Ya existe, pero es más cara que los fósiles. La próxima década va de replicar esa tecnología en el mayor número de sitios posible y escalarla a nivel mundial. Se está identificando a España, por sus recursos y su posición, como uno de los hub mundiales de esa industria verde: hidrógeno, solar, eólica, pero también en SAS, combustibles sostenibles para la aviación y navieras. Se crean a partir de biomasa, de residuos, basura, algas... y hay proyectos piloto haciendo esto. Ahora hay que hacerlo a nivel masivo. España tiene la oportunidad de invertir pero no vemos esas inversiones en Canarias, que nos hemos creído el mantra de que no hay industria, pero tiene muchas condiciones para ser ese hub en el que aviones y barcos paren aquí y reposten. También tenemos un problema importante de residuos y muchas especies invasoras que no sabemos qué hacer con ellas y pueden ser ingredientes para la biomasa. Me encantaría decir que tenemos que eliminar la aviación de Canarias porque las emisiones son una burrada, pero la aviación siempre va a ser parte de Canarias y hay que buscar alternativas porque no podemos seguir usando aviones con esas emisiones.

-En el fondo, todo este debate sobre la sostenibilidad ¿no es un debate sobre la igualdad?

-Sí. De igualdad, equidad, de nuestro papel como seres humanos en el ecosistema natural. No somos más importantes que el ecosistema ni que otros animales. Esto nos invita a reflexionar de forma holística pero ahí está el riesgo de que los ricos se vuelvan aún más ricos porque dominan la tecnología o que aprovechemos este avance para redistribuir la riqueza. Soy optimista. Queda mucho trabajo por delante, pero por primera vez en la historia tenemos las soluciones, la tecnología, la financiación, los proyectos exactos, las hojas de ruta... Lo tenemos todo. Falta hacerlo.

Comentarios

2030. no tendrás nada y serás feliz
Guauu...puro O2. Gracias.
Mejor que tener tres cosas hipotecadas y ser infeliz.
Se habla mucho de que la masificación no beneficia a nadie y solo trae problemas, pero me siguen otorgando licencias para la construcción de nuevos establecimientos hoteleros y aumentando las plazas de aviones a la isla. Estamos a punto de colapsar, con unas infraestructuras de vergüenza, la gente sin acceso a una vivienda y los extranjeros europeos comprando vivienda para especular con ellas. Y todo el mundo callado.
Sí, a la Ecotasa, hace tiempo que debería estar implantada En otros lugares existe desde hace años y no ha afectado al turismo Con esos ingresos se pueden cambiar muchas cosas en la Isla

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