-¿Cuáles son los principales servicios que ofrece el área de dermatología del Centro Médico Parque Lanzarote?

-La dermatología es una especialidad variada que ofrece servicios sobre las principales patologías cutáneas, del cabello y de las uñas. El especialista se encarga del diagnóstico de las principales enfermedades dermatológicas como el acné, los eczemas, la psoriasis, rosáceas, verrugas... Dentro de las funciones principales está el diagnóstico correcto de las lesiones melanocíticas, comúnmente conocidos como lunares y del cáncer de piel, tan frecuente en nuestras Islas. El dermatólogo también realiza cirugía ambulatoria para extirpación de tumores benignos y malignos de la piel, cirugía de las uñas, con el desarrollo de técnicas sencillas y cirugías reconstructivas complejas. Todo esto se recoge en la cartera de servicios del Centro Médico Parque Lanzarote.

-Tratar las afecciones en el cuero cabelludo y la alopecia son también parte de su especialidad, ¿no es cierto?

-El cuidado del pelo, tan de moda hoy en día, también es una parte principal de la dermatología, ya que la gente busca tricólogos, esta especialidad, en sí, no existe, la tricología es una rama de la dermatología. Somos los dermatólogos los principales conocedores de los trastornos patológicos que afectan al cabello y cuero cabelludo, incluyendo la alopecia, es decir, la pérdida de cabello, así como otras afecciones como caspa, seborrea, dermatitis seborreica… y, por tanto, de su diagnóstico y tratamiento.

-¿En qué momento se recomienda acudir a la consulta de dermatología?

-El paciente debe acudir a una consulta de dermatología cuando tenga alguna enfermedad cutánea aguda, tales como infecciones de tiña o sarna, erupciones en la piel, picor, verrugas..., o crónica ya sea acné, rosácea, psoriasis o bultos en la piel que necesiten una orientación diagnóstica y terapéutica. Es fundamental también el control de los lunares en aquellos pacientes que tengan muchas lesiones, con daño solar crónico y riesgo de contraer cáncer de piel.

-¿Qué pruebas son las más recomendables para alcanzar un diagnóstico?

-No existe una prueba específica para realizar un diagnóstico correcto en dermatología. Lo fundamental es realizar una historia clínica concienzuda y una exploración y descripción de las lesiones cutáneas. A veces nos podemos ayudar de diferentes herramientas que nos ayudan a completar el diagnóstico como los dermatoscopios y microscopios, también con pruebas complementarias como análisis y biopsias cutáneas.

-De un tiempo a esta parte la población se ha sensibilizado con los problemas que puede acarrear una exposición directa al sol sin protección.

-La población hoy en día está muy concienciada con los problemas que puede acarrear una exposición crónica prolongada y no tener una fotoprotección adecuada. Ello puede propiciar alteraciones y cambios en los lunares y la aparición de lesiones precancerosas y tumores malignos cutáneos. Esta exposición prolongada también puede conllevar a un envejecimiento prematuro de la piel con la aparición de las tan temidas arrugas.

-En consecuencia, la preocupación por el cáncer de piel ha ido en aumento. ¿Ha detectado un incremento de su incidencia? ¿Qué se puede hacer para su prevención?

-La preocupación sobre el cáncer de piel ha ido en aumento. Todo ello propiciado por la información que tenemos de primera mano en los medios escritos y visuales. Cierto es que la incidencia del cáncer de piel ha aumentado, pero esto no es una mala noticia, al contrario, hoy en día el cáncer de piel se detecta mucho antes y en fases muy iniciales el pronóstico es muy bueno. La buena formación actual de los médicos de familia facilita la labor de las y los dermatólogos a la hora de un diagnóstico y un tratamiento precoz del cáncer de piel.

“La cirugía ambulatoria sirve para extirpar tumores benignos y malignos”

-¿Cuáles son las recomendaciones para evitar problemas dermatológicos, sobre todo en Canarias con la exposición continua a los efectos nocivos del sol, el viento y la calima?

-Nuestras bienaventuradas islas nos permiten tener un clima cálido durante todo el año. En general, la radiación UV en las Islas Canarias es alta durante todo el año, pero puede ser especialmente intensa en los meses de verano, de junio a septiembre. En esta época del año, la intensidad de la radiación UV puede superar los índices de 11, que se considera un nivel extremadamente alto y peligroso para la piel. El hecho de tener sol todo el año implica tener una fotoprotección adecuada. Para ello debemos adquirir en primer lugar ropa que nos proteja las zonas más expuestas, sobre todo en personas que están mucho tiempo al sol por actividades laborales o lúdicas. Esta ropa tiene un distintivo específico que es UPF 50 que es una medida de protección contra los rayos ultravioleta (UV) del sol que indica la capacidad de un tejido para bloquear los rayos UV. Las siglas UPF significan: Ultraviolet Protection Factor, que traducido es Factor de Protección Ultravioleta, y se utiliza para medir la eficacia de la protección solar de la ropa y otros textiles. La podemos encontrar en muchas marcas de ropa deportiva, de montaña y de pesca. También tenemos que optar por métodos de protección tópicos, cremas, lociones o geles, con el distintivo SPF, que es una medida de protección solar que indica la capacidad de un producto de protección solar para bloquear los rayos ultravioleta B (UVB) del sol. Es importante saber cómo, con qué frecuencia y en qué proporción se deben aplicar los protectores solares. Tenemos que tener una concienciación de evitar siempre las horas centrales del día, que es cuando la radiación ultravioleta es más alta, entre las dos y las cuatro de la tarde.