CULTURA

La sociedad que mató a las hermanas Cruz

M.J. Tabar 12 COMENTARIOS 10/12/2017 - 09:31

Lanzarote, 1919. Los caciques, escasos pero absolutistas, dictan la ley de una isla que malvive sumida en la miseria. Una mañana de mayo, la ventera y prestamista María Cruz aparece degollada. Su hermana Petra —separada, pobre, inteligente y alfabeta— es elegida como chivo expiatorio del crimen. Todo el mundo sabe que no fue ella, pero todo el mundo calla. Este suceso ha perseguido a al periodista Concha de Ganzo desde que lo conoció a finales de los años 80.

Ante la imposibilidad de construir un relato periodístico, con información contrastada y fuentes fidedignas casi un siglo después de los hechos, Concha de Ganzo decidió hilvanar una novela de ficción inspirada en un episodio negro, negrísimo, de la historia lanzaroteña. El crimen de las hermanas Cruz (Ediciones Remotas, 2017) “son mis respuestas a las preguntas que yo me hice”, dice Concha.

La escritora conoció por primera vez el suceso a finales de los años 80 del siglo pasado. Desde entonces, ella —que se confiesa “muy preguntona” y le encanta hablar con personas mayores— no ha dejado de intentar averiguar algo más sobre un episodio “horrible” que le suscitaba varias preguntas: “¿Cómo es posible que todo el mundo, aparentemente, supiera quién era el asesino y no hiciera nada?”. Hoy maneja una respuesta poco alentadora pero llena de lógica histórica: “Entiendo que la gente calló por supervivencia, porque si levantabas el dedo a lo mejor te culpaban a ti”.

A lo largo de las cien páginas de la novela, el lector se ve inmerso en un relato con tintes de thriller y claustrofóbica crónica costumbrista. Un texto que combina datos extraídos de sentencias judiciales con personajes y explicaciones imaginadas.

Ni los tribunales de la época, ni esta ficción contemporánea, aclaran lo que sucedió en aquel pueblo de Teseguite de principios de siglo XX, en una isla en la que era imposible sobrevivir sin la cooperación vecinal. Había que prestar el agua para sancochar las batatas y siempre echar un mano para ahuyentar a la enfermedad y el hambre. “Un gobernador civil llegó a contratar barcos para sacar a la gente de Lanzarote porque aquí no se podía vivir”, recuerda Concha.

Se sabe que María Cruz fue asesinada en 1919, que su hermana Petra fue acusada del asesinato, torturada y violada en la antigua cárcel de Arrecife. Murió poco después en el manicomio de Tafira (Gran Canaria). En 1927, con Petra ya fallecida, un juez reabrió el caso, la declaró inocente y ordenó detener a Marcos Concepción, Tomás Valiente y Luis Hernández. Sólo un año después el dictador Miguel Primo de Rivera ordenó el indulto de los tres acusados. Concha de Ganzo publicó varios reportajes en prensa. Antes lo hicieron Agustín de la Hoz y Leandro Perdomo. A nivel nacional, el caso lo dio a conocer la revista Interviú, refiriéndose a él como “el otro crimen de Cuenca”, por truculento.

“El crimen merece ser contado. La gente debe saber lo que pasó y cómo pasó. Lo duro y lo horrible que fue, y las consecuencias que tuvo, que para mí fueron lo peor”, dice Concha por teléfono desde Madrid, ciudad donde vive y ejerce el periodismo desde hace años.

La novela editada por el sello lanzaroteño Ediciones Remotas no aclara los hechos pero plantea varias verdades sobre el contexto histórico del crimen: “Nadie se atrevió a levantar la voz, siempre cabía la posibilidad de llamar la atención y acabar como aquellos tres: indefensos y culpables”, dice la novela.

La ficción también aporta un punto de vista “interesante” y distinto del temido Marcos Concepción, basado en el testimonio de una mujer “que lo conoció puertas adentro”. En cualquier caso, Concha remarca el carácter ficticio de la obra. “Todo es inventado, hasta el Teseguite de aquella época es pura invención”, dice. Aunque para elaborar la novela con rigor haya recurrido al asesoramiento de personas como Francisco Delgado, cronista oficial de Teguise.

 

Comentarios

en horabuena, por perseguir la verdad o por lo menos proclamar la inocencia.la leere.
No se hizo justicia entonces pero con este libro se pone a cada uno en su sitio...
Al comentario Nº 2. " Amarra la burra por el rabo ". Como dice por aquí. ¡ Conejo huido, palos a la madriguera ¡.
Que bien Concha, siempre arrojando un poco de luz, me encanta que sigas ahí <3
Por justicia debe mencionarse que el autor de los trabajos publicados a "nivel nacional", como dice el autor del artículo, fue José Luis Morales periodista de Gran Canaria. Y a los cacique sin nombres habría que añadir el clero. Puntos y comas que suelen omitirse..
Repito únicamente para añadir:Un libro recogió la historia en 1936, pero fue quemado por orden del cura de Arrecife. El silencio se rompió, como se señala, con la publicación en primicia en la revista Interviú por el periodista José Luis Morales.
Para los interesados vale la pena leer el resumen del trabajo de José Luis Morales publicado por la revista Canarii (vínculo abajo). http://www.revistacanarii.com/canarii/20/petra-cruz-victima-de-la-justicia-en-lanzarote
Como bien dice la autora, es una novela. Creo que sería más interesante que se realizara un libro de investigación con lo ocurrido
Yo tengo 60 y siempre he oído la historia de María Cruz, así como quienes fueron los asesinos. No creo que ahora, saquen algo nuevo a relucir. ¡ Puro protagonismo y que los políticos de turno, se saquen la foto ¡.
Donde terminan los escasos datos que existen solo puede caber la imaginación, la literatura. Me parece una lectura muy interesante y un esfuerzo por recuperar nuestra memoria. Felicidades a su autora!
Concha me encanta que sigas ahí a pié del cañon, nada se puede hacer por éstas hermanas pero espero que algún lugar del infierno estén estos 3 y todos los que contribuyeron a estos horribles asesinatos.
cuando vuelva a Lanzarote,será posible q pueda conocer la casa? No se la dirección.

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