3 COMENTARIOS 28/11/2014 - 08:03

A Ana Mato la señala el juez como beneficiaria de la trama corrupta de Gürtel, a través de los regalos que recibió su marido, ex alcalde de Pozuelo de Alarcón. Ha tenido la mala suerte de que el día siguiente al auto del juez, Rajoy iba a anunciar en el Congreso de los Diputados sus medidas contra la corrupción y la han obligado a dimitir, porque si no, se libra. Debería haber dimitido muchos antes porque poco han cambiado las cosas que se saben de su relación con Gürtel: el pago de los cumpleaños de sus hijas con toneladas de confeti incluidas y las descomunales dimensiones del garaje de la ya ex ministra, donde se puede guardar un Jaguar y pasar desapercibido.

Las medidas de Rajoy contra la corrupción no son creíbles por muchos motivos que no hace falta enumerar, pero el principal es que no se las cree ni el presidente del Gobierno, aunque todo apunte a que son la misma persona. Y no se las cree porque Ana Mato, por su vinculación con Gürtel, resulta que ya no vale para ministra pero sí vale para seguir siendo miembro del Comité Ejecutivo del Partido Popular, su máximo órgano ejecutivo y para seguir siendo diputada, y seguir cobrando su sueldo, lógicamente.

Es curiosa esta doble vara de medir pero no es exclusiva. Saltan dos paralelismos de esa duplicidad en el terreno insular, que es el que nos atañe (hay más, ya lo sé, queridos lectores). Al ahora parlamentario de CC, heredado del PIL, Juan Pedro Hernández, un tribunal le inhabilitó por prevaricar para ejercer como concejal pero no como diputado, y como lo dijo un tribunal, pues CC no tiene más que añadir y puede seguir en su tarea. Hay que recordar que está condenado, no imputado.

Y el otro caso es el del flamante portavoz, también heredado del PIL (y del PSOE), detenido por la UCO en el caso Enredadera, del que se dijo que se tomarían medidas cuando volviera de Sevilla de declarar. Volvió hace dos semas pero parece que no ha habido tiempo aunque la respuesta está clara. Ya ha dicho San Ginés que “Sergio Machín no tiene responsabilidades de gobierno y, por lo tanto, no va a pasar nada”. Es decir, que no sirve para tener responsabilidades pero sí para seguir cobrando un sueldo aunque no haga nada (como Ana Mato).

Una bonita forma de dar ejemplo y de luchar contra la corrupción. Qué tiempos aquellos en que San Ginés, nada más llegar a la presidencia del Cabildo corrió raudo a la UCO a denunciar a Carlos Espino, pero no porque quisiera, sino porque era “su obligación”. Ahora, cinco años después parece que ya no se fía del criterio del mismo juez y dice que “no ve dónde está el delito” en el caso de Fernando Clavijo. No olviden no obstante, que es muy posible que esté en lo cierto porque si de algo sabe el presidente del Cabildo es de Derecho. Y si no que se lo pregunten a la juez del caso Stratvs.

Comentarios

No te he visto comentar nada sobre las mas que necesarias dimisiones de Chávez y Griñan, por cierto en peor situación procesal que Mato, que no tiene ninguna situación procesal ....
Creo que hoy no ha sido usted imparcial ¿ que pasa con los imputados del PSOE ? ¿ que pasa con el teniente alcalde Montelongo en Arrecife ?. O todos o ninguno, amigo Saul.
La situación procesal de Mato es la de responsable civil por beneficiarse del delito de blanqueo y cohecho de su esposo. Probablemente se siente en el banquillo aunque pague lo que le atañe. Saúl ya ha rajado, bien y merecido, de Montelongo y del PSOE...que la envidia y la subjetividad no te impida ver la realidad.

Añadir nuevo comentario